el ministro de interior español en donostia
Rubalcaba vincula los «pasos" del Gobierno a que «no haya violencia"
Alfredo Pérez Rubalcaba participó ayer en un acto de presentación de los candidatos del PSE a los comicios del próximo mes de mayo. En su intervención, el ministro español de Interior arremetió contra el PP, pero dedicó gran parte de sus palabras a hablar de la situación política en Euskal Herria y sobre la izquierda abertzale. Aseguró que el Ejecutivo de Rodríguez Zapatero «sigue comprometido con la paz" para agregar que hoy día «no hay proceso de paz".
DONOSTIA
El ministro de Interior español acudió ayer a Donostia para participar en un acto preelectoral del PSE, en el que esta formación presentó a sus candidatos de cara las elecciones municipales y a las Juntas Generales del próximo mes de mayo. En presencia de numerosos afiliados y compañeros de partido, Alfredo Pérez Rubalcaba se refirió al momento político y al proceso abierto en Euskal Herria, y fijando la posición del Ejecutivo que preside José Luis Rodríguez Zapatero, afirmó que «seguimos comprometidos con la paz, pero la paz tiene sus reglas y esas reglas no nos las vamos a saltar».
«En este país hay muchos tipos de personas y todas caben en un proyecto plural, y estamos dispuestos a dar pasos para que estén todos, los que están ahora y también los que están fuera, pero, eso sí, no daremos un sólo paso mientras subsista la violencia» declaró el mandatario español, sin especificar más y obviando la situación de alto el fuego que mantiene ETA.
«No estamos en la paz»
Es más, Rubalcaba negó la mayor, y tras recordar que esta misma semana se cumple un año desde que la organziación armada declarara el cese de sus acciones, sostuvo que ETA «rompió la tregua» tras el atentado contra la T-4 de Barajas el 30 de diciembre.
A este respecto, el titular de Interior señaló que «no estamos en la paz ni en el proceso de paz, estamos en una situación de violencia porque lo quiso ETA».
En su discurso, quien ha ejercido una función clave en el PSOE desde hace más de dos décadas, declaró que este partido está «comprometido con un proyecto de convivencia en Euskadi», proyecto que limitó y situó dentro del «marco de la Constitución», en el que «cabemos todos». Haciendo mención especial a Jesús Eguiguren, Rubalcaba agradeció la «ayuda» del PSE al Gobierno de Rodríguez Zapatero, y acusó al PP de ser «miserable con los socialistas vascos» al criticar la actuación del presidente español y «basar su oposición en la mentira y la manifestación».
En este sentido, declaró que el partido que lidera Mariano Rajoy está «buscando a ETA deses peradamente», como a su parecer hizo tras los atentados del 11 de marzo de 2004, y le echó en cara el tratar de debilitar al Gobierno español haciendo «una política irresponsable, sectaria y partidista».
Otro de los intervinientes en el acto político de ayer en Donostia fue el secretario general del PSE, Patxi López, que criticó a Batasuna por «exigir a los demás que nos sumemos a sus pretensiones sin asumir ellos sus propias obligaciones, sin dar el paso que les corresponde para ser tenidos en cuenta».
López, en cualquier caso, tuvo también palabras de censura para otras fuerzas políticas, como el PP o el PNV.
Respecto a la formación de María San Gil, el líder del PSE aseguró que su partido «no quiere saber nada de un PP que sólo destruye, al que le importa un pimiento el país, la sociedad vasca y española, la convivencia y la paz, y que sólo busca el poder y los votos atacando a los socialistas». «Están solos y seguirán solos» agregó, insistiendo en que «con los socialistas vascos que no cuenten para nada, porque no estamos dispuestos a compartir nada con quien hace tiempo que traspasó la línea de la decencia política».
Por ello, reiteró que «nada con el PP, si no cambia esa deriva que está sumiendo a este país en la crispación más absoluta».
«El sector del partido»
Del grupo jeltzale, López dirigió sus dardos al presidente del GBB, Joseba Egibar, y al candidato a la Diputación de Gipuzkoa, Markel Olano. Al primero, le preguntó si «su objetivo es aplicar las fórmulas del nacionalismo más rancio para estancarnos y enfrentarnos», mientras que se refirió a Olano al expresar su rechazo a «gobernantes que nos generen problemas porque Egibar le obligue a poner por encima de los intereses de Gipuzkoa los de su partido o del sector del partido que él representa».
Después de que la víspera Egibar volviera a defender la vigencia de la propuesta de reforma del estatuto del Gobierno de Lakua, el líder del PSE censuró que «sacó a pasear el fantasma del Plan Ibarretxe», y le acusó de «volver a un pasado fracasado y derrotado, volver a claisificar, a separar a los ciudadanos de primera o de segunda según su adhesión a la causa nacionalista».
Insistiendo en su mención de la situación interna del PNV, López se refirió a la renuncia de Jon Jauregi como candidato a la Diputación de Gipuzkoa, y valoró que los dirigentes jeltzales «están más preocupados por resolver sus diferencias internas y los problemas que les ha creado un candidato, que por dar respuesta a la preocupación de la gente». «Por suerte, a los nacionalistas siempre les queda Madrid para echar la culpa a los socialistas de los desastres que se buscan ellos solitos», añadió.
Con cierta sorna, el dirigente del PSE agregó que «si tienen que descabalgar al candidato del PNV en Gipuzkoa por sus problemas con Hacienda, ya nos h dicho Egibar que la culpa la tienen Madrid y los socialistas, que han estado moviendo los hilos en la sombra. Que PNV y EA no se ponen de acuerdo para fijar el Impuesto de Sociedades, pues la culpa también es de Madrid, que no quiere que la Comunidad Autónoma Vasca progrese».
Además de López, estuvieron en Donostia el presidente del PSE, Jesús Eguiguren, y todos los candidatos del herrialde.
La cita de ayer deparó imágenes de interés como ésta en la que Elorza, Eguiguren y Rubalcaba aparecen pensativos.
El PSE presentó en la mañana de ayer a los candidatos guipuzcoanos para las elecciones de mayo. Odón Elorza volverá a encabezar las listas al Ayuntamiento de Donostia, y Miguel Buen hará lo mismo sobre la Diputación del herrialde.
El ministro de Interior agradeció a los miembros del PSE la «ayuda» que han dado al Ejecutivo español, un agradecimiento que, «sobre todo», dirigió al presidente de este partido, Jesús Eguiguren, con quien se le pudo ver charlando en los pasillos.
Además de afiliados y candidatos del PSE, en el acto participaron también responsables institucionales como el delegado del Gobierno español en la CAV, Paulino Luesma, y la secretaria de Estado de Cooperación Leire Pajín.
En su intervención ante los dirigentes y candidatos del PSE, Alfredo Pérez Rubalcaba se refirió a la presencia de la izquierda independentista vasca en las próximas elecciones municipales, a Juntas Generales y al Parlamento de Nafarroa, y lo hizo asegurando que «queremos que la izquierda abertzale vaya a las elecciones, pero depende de ellos». El ministro de Interior español, en este sentido, declaró que «deben acatar la ley y rechazar clara, explícita y definitivamente la violencia». «A las elecciones van quienes cumplen las leyes, incluida la Ley de Partidos», zanjó.
Curiosamente, el presidente del PNV, Josu Jon Imaz, coincidía ayer con lo expuesto por Rubalcaba en Donostia al señalar que «Batasuna tiene en su mano ir a las elecciones con todas las garantías».
El líder jeltzale hizo estas declaraciones en una entrevista concedida a «Diario Vasco», de la que gran parte está destinada a hablar de la formación independentista. Imaz, a este respecto, destaca que su partido ha criticado la Ley de Partidos, pero agrega que «tampoco estoy dispuesto a que estemos los dos próximos meses com emplazamientos constantes por parte de Batasuna para ver qué vamos a hacer todos los demas para que estén en las elecciones». «Batasuna tiene en su mano poder estar en las elecciones municipales y forales con todas las garantías, no tiene más que tener un posicionamiento claro y nítido en favor de las vías institucionales y democráticas y en contra del uso de la violencia. Sería tan sencillo como eso», declara Imaz en este diario, al tiempo que agrega en otra respuesta que «ese mundo tiene que tener audacía y hasta el momento no la han demostrado».
En esa entrevista, el presidente del PNV no quiere adelantar posibles alianzas post-electorales de su partido, pero preguntado por Gipuzkoa valora que en este herrialde «va a ser muy importante la búsqueda de aquellos compañeros de viaje para poder llevar a cabo proyectos estratégicos», entre los que destaca «la modernización del tren y en el puerto de Pasaia».
Sobre la retirada de Jon Jauregi como candidato a la Diputación de Gipuzkoa, Imaz sostiene que «la tormenta ha pasado y hay que mirar hacia adelante», y sostiene que «lo que nos corresponde es mirar al futuro».
También al escenario electoral del mayo y a la presencia de la izquierda abertzale en esa cita se refirió en otra entrevista, en este caso en «El País», el ministro español de Justicia Mariano Fernández Bermejo, quien asegura que los servicios jurídicos del Estado «están absolutamente en tensión». Fernández Bermejo, que la semana pasada anunció que «torpedeará» candidaturas abertzales, admitió que le «tocó» a él ilegalizar la candidatura de Aukera Guztiak, y señaló que «tenemos en marcha un operativo» para aplicar la Ley de Partidos.
Una ley, que el ministro de Justicia considera que «debe mantenerse mientras existan en este país grupos que no aceptan el juego democrático», y agrega que «debe aplicarse con la contundencia que exige el momento». «Batasuna está ilegalizada, por tanto, no puede comparecer en las actuales condiciones» concluye a este respecto Fernández Bermejo.
Alfredo Pérez Rubalcaba criticó duramente la actitud del PP, y afirmó sentirse «muy mal». «Como Gobierno me siento injustamente tratado» afirmó el ministro de Interior español, acusando al partido de Mariano Rajoy de basar su política en «la mentira».
