La huelga general en la enseñanza universitaria convocada por Ikasle Abertzaleak para mañana, bajo el lema «ikasle borrokaz lortuko dugu! Eskubideak eskuratu!», sigue calentando motores y recabando apoyos. Además, en centros educativos de secundaria también habrá movilizaciones en favor de los nueve puntos recogidos en la Carta de los Estudiantes vascos.

Ayer, el Consejo de Estudiantes de la UPV se sumó a la convocatoria. En palabras del presidente de este organismo, Asier Lauzirika, «tras analizar durante las últimas semanas la situación que vivimos los estudiantes de la UPV, queda claro que nuestros derechos son vulnerados constantemente». Una situación en la que, como indica el Consejo de Estudiantes, también se incluye que «el derecho a estudiar en euskara es vulnerado una y otra vez».

No fue éste el único recorte de derechos que denunció el Consejo estudiantil, ya que «además de la vulneración lingüística, tenemos que soportar el control social y la presencia policial tanto en las facultades como en los campus, con cámaras de seguridad por doquier, empresas privadas de seguridad o presencia de diferentes cuerpos policiales». Junto a ello, recordaron «la falta de un transporte digno o la ausencia de infraestructuras».

El Consejo de Estudiantes de la UPV lamentó que «en una situación en la que se vulneran de forma continuada nuestros derechos, en lugar de tomar medidas para que se respeten y arreglar esos problemas, los mandatarios universitarios nos han metido de lleno en el Proceso Bolonia». Un proceso que, como explicaron, «traerá grandes cambios» y que «ha sido entregado al alumnado una vez decidido». Asimismo, el Consejo considera que «en este proceso no ha existido debate alguno y la participación del alumnado ha sido nula». Ante está situación, Lauzirika incidió en que «no queremos debatir sobre las migajas del Proceso de Bolonia; queremos debatir y decidir si queremos el proceso o no, ya que nos quieren imponer un modelo de universidad que el alumnado no ha decidido». Por todo ello, llamaron a «que se abra un debate democrático para decidir qué modelo de universidad queremos» y mostraron su respaldo a la convocatoria de huelga general.

Por su parte, Segi expuso sus razones para sumarse a esta iniciativa de movilización en las universidades y, concretamente, aseguró que el Proceso Bolonia «nos ha sido impuesto de arriba y supone la homogeneización de las universidades».

La jornada de paro y movilizaciones también ha sido respaldada desde el ámbito de la política. Batasuna mostró su apoyo a la protesta

Numerosas protestas

Durante las últimas jornadas son multiples los actos de protesta y movilizaciones que se están llevando a cabo en diferentes centros. Así, en el Campus de Gasteiz, un grupo de estudiantes lanzó pintura contra la delegación del Rectorado para denunciar su responsabilidad en la aplicación del Proceso Bolonia. De manera simultánea, otro grupo de jóvenes realizó un corte de trafico para anunciar la huelga general universitaria de mañana. A las 11.45, también en Gasteiz, unos 50 alumnos realizaron una sentada en la entrada de la Facultad de Filología. Posteriormente, se dirigieron con una estruendosa marcha a la delegación del Rectorado para exigir la paralización del Proceso Bolonia.

Mientras tanto, en la UPNA ayer se registraron diversos incidentes entre alumnos y miembros de la seguridad de este complejo universitario. Un grupo de jóvenes habían llenado de humo el aulario como forma de protesta.

Por otro lado, en el Instituto Amazabal de Leitza se celebrará una mesa redonda con la participación de la representante de EHBE Aitziber Larrea, la miembro de Sortzen Ikasbatuaz, Kalen Astiz, y el integrante de Udalbiltza Ruben Iglesias. En Altsasu medio centenar de personas tomó parte en un taller de igualdad.