Alertan sobre la amenaza al entorno natural de Astigarribia en Mutriku
Ante el proyecto de construir una nueva carretera para conectar Elgoibar y Mutriku, que incidirá en la ampliación del puerto, Mutriku Natur Taldea denuncia que la destrucción de la riqueza natural y cultural de la zona es innecesaria, al existir ya infraestructuras suficientes.
GARA |
Mutriku Natur Taldea se ha posicionado en contra del proyecto de construir una variante entre Mutriku y Sasiola, que atravesaría el entorno natural del barrio de Astigarribia, a orillas del Deba. El proyecto pretende «reforzar» la conexión entre el municipio costero y Elgoibar y, como han explicado desde Natur Taldea, «eso generará la ampliación del puerto». Creen innecesaria la construcción de una nueva carretera, ya que consideran que «esta nueva conexión supondrá una duplicidad respecto al proyecto de ejecución de la nueva variante Deba-Mutriku y, por lo tanto, invalidaría por innecesaria esa obra que ha necesitado más de dos años de trabajo y la destrucción del humedal de Arzabal», más la dotación de 12 millones de euros para la construcción de esa variante, según informaron los ecologistas.
Si lo expuesto no fuera suficiente razón para rechazar el proyecto, el colectivo ha recogido los impactos medio-ambientales que produciría el mismo: «Astigarribia es uno de los últimos enclaves donde se mantiene aún inalterado el hábitat del visón europeo y forma parte del corredor Arno-Izarraitz, cada vez más deteriorado por las innumerables carreteras y polígonos que la circundan. Es el barrio más antiguo de Deba Behea que conserva una antiquísima calzada y una ermita visigótica». Han querido destacar la calidad paisajística de la zona, situada en el límite del Lugar de Interés Comunitario (LIC) de Arno, alertando sobre la «irreparable pérdida» de la misma.
Según los cálculos del colectivo, afectaría a cursos fluviales «alterando fuertemente zonas consideradas en el PTS de Ordenación de márgenes de ríos y arroyos de la CAV, así como a `márgenes con vegetación bien conservada' y zonas con alta `vulnerabilidad de acuíferos'». La construcción de la carretera, y la infraestructura necesaria para ello también afectaría a la vegetación, considerada como «hábitat prioritario contemplado en la Directiva de Hábitats», que integra robledales, alisedas riparias, encinares cantábricos y hayedos, entre otros.
En cuanto a la fauna, advierten de que supondría una amenaza de desaparición de áreas que albergan a especies incluidas en el Catálogo de Especies Amenazadas de la Comunidad Autónoma, como son los murciélagos de gran y pequeña herradura, el sapo corredor, el lirón gris o el mencionado visón europeo. También han destacado la importancia de Astigarribia como conexión de distintas zonas para la fauna, ya que la vaguada del valle es «el único corredor natural» que une los entornos naturales de Arno e Izarraitz.
Como el barrio más antiguo del valle de Debabarrena, conserva una calzada de época romana, la que se conoce como el «camino de Doneja». Al parecer, esta calzada era utilizada por los peregrinos que en la Edad Media cruzaban Euskal Herria por la costa. Una orden de 1994 del Departamento de Cultura incluía esta zona en la lista de lugares afectados a la hora de modificar la delimitación del Camino de Santiago para calificarla como Bien Cultural.
En el mismo documento se destacaba la importancia de la calzada, la iglesia de San Andrés y el caserío Dorretxea de Astigarribia. Es reseñable el interés de los caseríos de esta zona, pues mantienen elementos constructivos de la época medieval. La iglesia, que data del siglo XI, es considerada una de las más antiguas de Gipuzkoa. Posee una ventana en arco de herradura considerada prerrómanica. En su interior se hallaron restos de la iglesia primitiva y varios sarcófagos, fruto de las excavaciones realizadas en 2000. En cuanto a restos romanos, varios historiadores sitúan en Astigarribia el asentamiento romano conocido como «Tritium Tuboricum» por antiguos geógrafos, entre ellos Ptolomeo. Algún historiador relaciona ese nombre con «Iturburuko».
Restos prehistóricos
En los alrededores de la zona montañosa de Arno, en cuyo pie se encuentra Astigarribia, existen numerosas cuevas y simas utilizadas por el hombre cavernícola. Se encuentran en las inmediaciones del río Deba, en los barrios de Olatz y Astigarribia. De este último destaca la cueva de Ermitia, estudiada por Barandiaran y en la que se han hallado restos pertenecientes a cuatro culturas prehistóricas.
La construcción de la carretera afectaría gravemente a todos estos elementos y, como curiosidad, dejaría sin validez la propaganda turística de Mutriku que dice «recorre los barrios verdes de Olatz y Astigarribia».
Mutriku Natur Taldea considera innecesaria una nueva carretera ya que la variante de Deba, de reciente construcción, cubre la necesidad de enlazar Mutriku con Elgoibar, el motivo expuesto para el nuevo proyecto para Astigarribia.
Según el colectivo, el proyecto ha estado paralizado porque los propios técnicos de la Diputación «saben que el valor natural, arqueológico, paisajístico y cultural del valle vale más que una apestosa carretera».