Michael Phelps lleva camino de convertirse en el mejor nadador de todos los tiempos. Tras imponerse contra pronóstico en la final de 100 metros mariposa a su compatriota Ian Corcker, el nadador de Baltimore tiene la posibilidad de alcanzar hasta ocho oros mundialistas si consigue ganar en las pruebas de 400 estilos y 4x100 estilos, que se disputan en la jornada de hoy.

El deportista estadounidense igualó ayer el récord del ahora cuestionado Ian Thorpe, alcanzando su sexta medalla en un mismo mundial. La marca, sin embargo, le costó mucho trabajo, dado que la modalidad de mariposa no es su especialidad.

Sólo la mayor potencia de Phelps permitió que se impusiera a Corcker, quien le batió en las dos últimas finales en Barcelona y Montreal, y que es el verdadero experto en la prueba. De hecho, éste último fue el dominador en la mayor parte de la final y en las series previas, donde había obtenido los mejores tiempos, pero sucumbió en el último metro a la poderosa brazada de Phelps.

Al menos, Corcker consiguió retener su récord mundial -situado en los 50.40-, pero perdió el título que había ganado en los dos últimos mundiales mencionados, Barcelona y Montreal. La prueba también sirvió para que Venezuela conquistara la primera medalla en un mundial, de la mano de Albert Subirats.

Ahora el siguiente reto del fenómeno de Baltimore es igualar e incluso superar el récord histórico de Mark Spitz, quien sumó siete medallas de oro en los Juegos Olímpicos de Münich en 1972. De momento, ha ganado todas las finales en las que ha participado: los 100 y 200 mariposa, los 200 libre, los 200 estilos y los dos relevos disputados hasta ahora, el 4x100 y el 4x200 libre.

La velocidad, norteamericana

Los nadadores estadounidenses también se hicieron con las pruebas de velocidad pura. Benjamin Wildman-Tobriner ganó en los 50 metros libres, tras superar al afroamericano nacido en el Bronx Cullen Jones y al sueco Stefan Nystrand, a quien de nada le sirvió obtener el mejor tiempo en la calificación.

Por su parte, la treinteañera Therese Alshammar se proclamó campeona del mundo de los 50 mariposa, tras haberlo conseguido seis años antes en los Mundiales de Fukuoka. La sueca, que es campeona de Europa y la velocista en activo con un palmarés más amplio, realizó un tiempo de 25.91, por delante de la australiana Dani Miatke y la holandesa Inge Dekker.

En la final de los 200 metros espalda, la estadounidense Margaret Hoelzer batió el récord de los campeonatos y se proclamó campeona con un tiempo de 2:07.16, rebajando en 24 centésimas el de la china Cihong He.

Finalmente, la afición aussie vibró con sus nadadoras de los 4x100 estilos. Las relevistas australianas levantaron de sus asientos a los espectadores en la piscina del Rod Laver Arena al batir la marca mundial de la especialidad, con 3:55.74. Las oceánicas rebajaron en 54 centésimas la anterior plusmarca que también tenían en su poder en una anterior carrera celebrada en Melbourne.