Alessandro Ballan (Lampre) y Leif Hoste (Predictor-Lotto) cumplieron los pronósticos en el Tour de Flandes, y el italiano logró su victoria más importante tras batir al belga en un apretado esprint, después de siete horas de lucha en el pavé y 259 kilómetros entre Brujas y Meerbeke. A Tom Boonen y Paolo Bettini (Quick Step) y a Oscar Freire (Rabobank) les fallaron las fuerzas en el decisivo Grammont. Txente García (Caisse d'Epargne) fue protagonista durante casi 200 kilómetros, y Markel Irizar (Euskaltel-Euskadi) fue el mejor vasco en la meta, 40º. Unna vez más, la afición flamenca llenó los tramos de pavé.

Ballan, de 27 años, sucede en el historial de la prueba Boonen, ganador los dos últimos años, y condena por tercera vez al segundo puesto a Hoste, que ya fue segundo en 2004 y 2006. El corredor del Lampre, reciente vencedor de Los Tres Días de La Panne, mostró un momento de forma envidiable. El año pasado ya destacó en las clásicas y este año, sin duda, ha dado un paso adelante.

Ballan atacó en el Grammont, a 16 kilómetros de la meta, y el propio Boonen tuvo que ceder. Sólo Hoste pudo alcanzar la rueda del italiano. Por detrás, el resto de favoritos veía como el triunfo se les escapaba. Boonen, Freire y Bettini no pudieron.

Los dos más fuertes ayer se entendieron y se jugaron la victoria en la recta final. Hoste arrancó con fuerza e incluso sacó de rueda a Ballan. El clasicómano del Predictor-Lotto apretó en busca de su corona en Flandes, pero Ballan no se dio por vencido y le superó en los últimos metros. Paolini (Liquigas), Kroon (CSC) y Gusev (Discovery) precedieron a los favoritos y Boonen sólo pudo ser 12º.

Brillante Txente

Una escapada de siete corredores, entre ellos Txente García, animó la carrera pues se escaparon en el kilómetro 56 y fueron cazados a falta de 21, después de tener una ventaja de 9.30. La llegada de Cancellara (CSC) y Steegmans (Quick Step) dio vida a la fuga, pero por detrás aceleraron. Txente siempre dio la cara y, tras sufrir un pinchazo, volvió a empalmar para sólo ceder en el tramo decisivo de la clásica.

Junto a Txente, Erviti, Alan Pérez, Horrillo e Irizar acabaron. Este último estuvo hasta el final en el pelotón delantero y llegó con Bettini o Freire.