Raimundo Fitero
Cánticos
Empieza a fallar mi octavo sentido que tanto me ha ayudado a detectar los montajes televisivos. El problema es de saturación, se acumulan de tal manera que debo hablar con MacGyver para ver si con su navaja multiusos me lo puede ajustar a las necesidades actuales de la vida audiovisual en donde nada es verdad, ni es mentira y ya no depende del color del cristal con el que se mira, sino del programa electoral o de los bonos canjeables del emisor, del receptor y del conductor.
Apareció en los noticiarios de tarde y noche de Tele 5 un individuo de origen tarraconense que se nos presentó como el único «español» que había alcanzado altos cargos en el régimen norcoreano. El susodicho habló para una cámara no identificada, con un micrófono en bandolera y lo hizo con un vestido mitad monje, mitad soldado, algo tipo Mao, pero con otro toque, y lo que dijo tenía aires ignacianos, o sea, lo que dijo, no sonaba mucho a comunismo, ni a ortodoxia marxista, sino más que nada a una especie de secta, donde se podía encontrar el paraíso, la felicidad, el desarrollo. Vaya, que el muchacho podía muy bien estar dando cursillos de autoestima en cualquier centro tántrico o esotérico o incluso participar en los ejercicios espirituales de cualquier partido democristiano.
Después se nos pasaron unas imágenes vestido de militar, arengando a las masas concentradas en un auditorio con tres mil norcoreanos aclamándole, y coreando sus cánticos. Y ahí es donde me saltaron las alarmas, se me acabaron las pilas de detector de montajes y me sentí atrapado en un laberinto de preguntas. ¿Quién había hecho el montaje? ¿Los servicios secretos norcoreanos? ¿La CIA, el CNI, las FAES, la Cope o una ONG con intereses especulativos en el arroz camboyano? ¿Se trata de una simple curiosidad socio-política para relleno de fines de semana largos? ¿Era un documento con valor universal? ¿Quién es, era, fue, será el tal Alejandro Cao? ¿O es Kao? ¿Se trata de un montaje político, o de un anuncio subliminal? Si es subliminal, es muy subliminal, porque de momento no detectamos el producto a la venta? ¿Puede ser una nueva campaña de MTV? Voy a pedir hora con House.