El Athletic no está para ofrecer facilidades de ningún tipo a sus rivales y dejar de contar de forma consciente -los datos facilitados el viernes demuestran que la asistencia desciende en este tipo de partidos- con 10.000 gargantas animando al equipo en una cita tan trascendental, es un error. Se puede justificar que el club necesita recaudar dinero para no aumentar la deuda y que está presupuestado, pero una cosa son las previsiones y otra la realidad. El futuro del Athletic en Primera está en juego y aunar el mayor apoyo posible es necesario en esta tesitura. Y no se trata de hacer populismo para agradar a las masas. Porque no nos engañemos, un millón y pico de euros es una cantidad de dinero importante, pero en un club con un presupuesto que ronda más de 40 millones de euros es casi calderilla. ¿No se pueden ajustar los gastos en otras partes?, me vienen a la cabeza Zubiaurre, las destituciones de entrenadores...