ELECCIONES EN EUSKAL HERRIA
ANV considera que ha sido juzgada «con la mentalidad de un Estado colonial»
A escasas horas de que se agotara el plazo oficial para recurrir el fallo del Supremo sobre la anulación de 133 candidaturas de ANV y la totalidad de las agrupaciones electorales de la izquierda abertzale, la histórica formación denunció ayer que los tiempos para recurrir «son cortísimos, abusivos y demenciales", aunque confirmaba que acudirían al Constitucional. El PNV volvió a ser objeto de las críticas más duras.
Gari MUJIKA-Jasone MITXELTORENA | DONOSTIA
Ante el triunfalismo mostrado tanto por el Gobierno español como por el PSOE tras la anulación de 133 candidaturas de ANV por el Tribunal Supremo, desde la dirección de la histórica formación abertzale aseguraron ayer que «aquí los únicos que han triunfado han sido los planteamientos más totalitarios del neofranquismo español». Acusaron al PNV de ser parte esencial en el diseño de este «absurdo» con el objeto de arremeter contra la izquierda independentista, y le advirtieron de que en las próximas semanas mostrarán a la sociedad vasca, pueblo a pueblo y barrio a barrio, la actuación que la formación jeltzale ha realizado «sin ninguna vergüenza» en los últimos cuatro años valiéndose de la Ley de Partidos y del «apartheid político» resultante.
El secretario general de ANV, Antxon Gómez, su presidente, Kepa Bereziartua, y la cabeza de lista de la formación para las Juntas Generales de Gipuzkoa, Idoia Ibero, comparecieron ayer en Donostia para salir al paso de la anulación de 133 de sus listas electorales y valorar esta actuación judicial que, a su entender, pivota sobre «una mentalidad de Estado colonial». «Una justicia colonial que juzga a los nativos desde la superioridad del Imperio y que les impone lo que pueden votar y lo que no. Porque parece no considerar madura a la sociedad vasca para tener sus propias candidaturas», añadió Bereziartua.
Los dirigentes de la formación surgida en 1930 añadieron un ejemplo de este «absoluto absurdo»; el hecho de que en varios municipios vascos sólo sea el PP la única candidatura «que han dejado en pie» tras la iniciativa de la Fiscalía y la Abogacía del Estado, posibilitando que aunque «esta candidatura jamás ha cosechado un solo voto» en algunos de esos pueblos puedan hacerse con la Alcaldía aun sin respaldo social alguno.
«El entierro de la democracia»
Ante tamaña situación, anunciaron que el equipo jurídico de ANV trabaja «a contrarreloj» para recurrir con «los argumentos jurídicos más contundentes» la decisión del alto tribunal español, aunque Bereziartua cuestionó que esta batalla «verdaderamente» se libre en el terreno jurídico y no en el político.
Aunque ANV no adelantó en qué basarán los recursos que interpondrán en el Tribunal Constitucional -a medianoche de ayer finalizaba el plazo oficial-, sí constataron que, a su parecer, estas deliberaciones de la justicia española suponen «el fracaso total y el entierro de la democracia». El presidente de la formación abertzale consideró que los tribunales han «retorcido» la Ley de Partidos Políticos «hasta extremos inimaginables, con flagrantes contradicciones y meros juicios de valor que enrojecen cualquier inteligencia demócrata».
En este punto, Bereziartua consideró «un insulto a la inteligencia» el hecho de que los tribunales no sólo no se limiten a aplicar la Ley de Partidos en esos términos extremos, sino que se pronuncien contra ANV con términos como «listas invadidas». Pero mostró aún más su enfado al denunciar que «lo absurdo y la mentira llegan al máximo cuando se acusa a la dirección de ANV de contaminar nuestras propias listas».
Al respecto, trajo a colación que incluso la propia Fiscalía española y la Abogacía del Estado «excluían esta posibilidad» en sus escritos de impugnaciones.
No obstante, el presidente de la histórica formación reiteró el compromiso de la dirección y las diferentes candidaturas de ANV de «dar la batalla legal y de la opinión para que las ideas de izquierda e independentistas de cientos de miles de euskaldunes estén presentes en las próximas elecciones».
El «nepotismo» jeltzale
Pero a la hora de situar las responsabilidades sobre los impulsores y ejecutores de que 133 listas electorales de ANV hayan sido tildadas como «ilegales» por los tribunales españoles, la mayoría de las denuncias fueron a parar a la formación con sede en Sabin Etxea: el PNV.
El secretario general de ANV denunció que el PSOE no podría haber construido un escenario de tamañas vulneraciones sin «el juego oculto» y la ayuda del PNV. Es más, consideró como esencial la labor de la formación jeltzale para «vender» a la sociedad vasca esta situación antidemocrática como supuesto resultado de la responsabilidad de la izquierda abertzale.
Añadió que el PNV que lidera Josu Jon Imaz está haciendo una ingente tarea para evitar en la pugna electoral el debate sobre los distintos proyectos políticos, algo a lo que, a su juicio, «le tienen miedo».
«El PNV lleva muchos meses preparando el terreno, usando todo su entorno mediático y político para acusar a la izquierda abertzale y a la izquierda independentista de ser los causantes de los propios atropellos que sufren», añadió Gómez que, acto seguido, protestó afirmando que «hace falta tener una mente muy retorcida para eso».
Sacando los colores al PNV
Indicó, prosiguiendo con el hilo argumentativo, que para ANV «los ataques contra los derechos de las personas y de los derechos colectivos de los pueblos son simplemente condenables» por lo que consideró una «actitud totalmente inmoral acusar a las propias víctimas de los ataques dirigidos en contra de ellas».
Pero más allá de la apuesta para la consecución de un escenario electoral con la izquierda abertzale arrinconada, ANV reprochó a la formación que lidera Josu Jon Imaz la gestión que ha realizado en los últimos cuatro años de la exclusión de la izquierda abertzale de las instituciones vascas. Gómez consideró deleznable que el PNV, «sin ninguna vergüenza», se haya «aprovechado» de la Ley de Partidos española para mantener e incluso aumentar sus cotas de poder y ahondar en una política «salvaje» de neoliberalismo.
Acto seguido, con ironía, se dirigió a los dirigentes del PNV para pedirles que estén tranquilos. Prometió que será ANV la encargada de desenmascarar las actuaciones que la formación jeltzale ha realizado durante estos cuatro años largos de ilegalización. «ANV, en las próximas semanas, pondrá en evidencia, pueblo a pueblo y barrio a barrio, las consecuencias de la barra libre que han tenido los jeltzales en esta legislatura sin una oposición real», añadió Antxon Gómez.
A la par, anunció que presentarán a la ciudadanía vasca las alternativas reales que suponen las candidaturas de izquierda e independentistas, señalando que es éste el verdadero «miedo» de formaciones políticas como la jeltzale.
Agradecimiento a ERC
Tampoco fueron críticas y denuncias lo único que virtió ANV en su comparecencia de Donostia. Hubo lugar para un agradecimiento concreto.
El presidente de la formación histórica, Kepa Bereziartua, saludó que «en esta vorágine de agresiones de derechos políticos y sociales», otra formación con una trayectoría tan dilatada como la de ANV, Esquerra Republicana (ERC), haya salido al paso para denunciar el atropello que supone actuar contra las candidaturas de la formación vasca. «Y sobre todo, agradecer su claro posicionamiento de que así las elecciones se realizarán sin las suficientes garantías democráticas», subrayó.
Claros y concisos fueron también los dirigentes de Acción Nacionalista Vasca cuando aseguraron, dirigiéndose a la sociedad vasca, que no dejarán que las ideas de izquierda e independentistas sean «pisoteadas» y prometió que éstas estarán presentes en las próximas elecciones municipales y forales del día 27. Una vez dicho esto, y para denunciar este compendio de atropellos, animaron a los ciudadanos vascos a que el próximo sábado participen en masa en la manifestación que ANV ha convocado en Bilbo como respuesta a las agresiones sufridas.
Poco después llegó el turno de las preguntas, en una comparecencia con una inusitada presencia de medios de comunicación. Pero cuando no hubo cuestiones por parte de los periodistas, el presidente de ANV, Antxon Gómez, les recriminó que mientras que cada día escriben páginas y páginas sobre la formación histórica sin conocimiento de causa, se evite hacerles preguntas en una comparecencia pública. Tampoco entonces las hubo.
El ilegalizado, ilegalizador
Ya por la tarde, una nueva comparecencia de ANV en Iruñea daba a conocer la composición de la candidatura de la histórica formación abertzale para el Parlamento de Nafarroa.
Ante la impugnación de 133 de sus listas, un hecho «llevado a cabo por el Gobierno español» en palabras del cabeza de lista Santi Lorente y de Ainhoa Irigibel, denunciaron la actitud del PSOE, «que es incompatible con los derechos democráticos». Recordaron que en 1936 ANV y PSOE formaron coalición en el Frente Popular y que ambos fueron ilegalizados por los «fascistas» de Franco. Por eso, añadieron que «resulta inaceptable que el que ha sido víctima del fascismo sea ahora el fascista al ilegalizar nuestra formación». En la misma línea, señalaron que el partido de Zapatero no puede ser alternativa para Nafarroa ya que sigue la estrategia de UPN y «se arrodilla ante él». Y Lorente sentenció que si su formación no concurre a las urnas, Miguel Sanz será otra vez presidente.
Ambos representantes criticaron duramente la política de la derecha, ya que «han convertido a Nafarroa en problema cuando nosotros decimos que es la solución». Señalaron la trayectoria de la derecha para afirmar que no se olvidan de «los más de 3.000 navarros fusilados, desaparecidos, vejados y humillados, ni tampoco de la represión, persecución y cárcel del régimen franquista».
Para «crear un nuevo horizonte político», consideran imprescindible que ANV esté presente. Y llaman a la sociedad navarra para que apueste por el cambio y por el cese de los ataques a la cultura, el euskara, la enseñanza o la sanidad pública.
El secretario general de ANV ironizó con que la situación se parecería más a una película de los hermanos Marx si no fuera de una gravedad extrema. Similares términos empleó para referirse al uso de la palabra «contaminados» para citar las listas anuladas.
Acción Nacionalista Vasca ha convocado una marcha nacional en Bilbo el proximo sábado para denunciar el atropello de los derechos democráticos que, a su juicio, resulta de la dinámica de ilegalización. Tanto la organización juvenil Segi como Sare Antifaxista han secundado el llamamiento del partido abertzale.
G.M.
Kepa Bereziartua, en cambio, mostró un «regalo» enviado desde Madrid y que supuso se trataría de un sambenito para dejar de pertenecer al grupo de los «contaminados». Se trata de un llavero que porta tanto la bandera española como el rostro de Franco.
Así valoró el alcalde jeltzale de Bilbo la situación creada tras la decisión del Supremo. Tras afirmar que tiene mucho respeto a ANV, criticó que en sus listas haya miembros de Herria Aurrera y justificó la aplicación de la Ley de Partidos hecha por el PSOE.
El sindicato abertzale tilda lo ocurrido con las agrupaciones de electores y ANV de «atropello», subraya que «afecta a la legitimidad del proceso democrático» y añade que dificulta todavía más la apertura del necesario proceso de diálogo.
ERC traslada su solidaridad a la izquierda abertzale mientras que ICV alerta de que «es un error cerrar todas las vías de acción política a la izquierda abertzale». Desde IU, Gaspar Llamazares deseó que el TC reponga el derecho de todas las listas de ANV.
La mahaikide y candidata a las Juntas Generales de Gipuzkoa de Abertzale Sozialistak Karmele Aierbe advirtió ayer al PSOE de que «está enterrando el proceso» con las anulaciones de las plataformas electorales, lo que, a su entender, supone «un circo jurídico» que se desarrolla porque detrás «hay decisiones políticas». También denunció la fiel compañía del PNV en ese camino de ilegalización y conculcación de derechos, y advirtió a ambas formaciones de que la izquierda abertzale no aceptará «sus instituciones antidemocráticas», ni que «se pongan trabas» al trabajo que hacen sus electos y concejales en los municipios vascos.
En una rueda de prensa que se desarrolló exclusivamente en euskara, Aierbe compareció junto a los también candidatos de AS para las JJGG de Gipuzkoa Joxean Etxeberria, Juan Mari Mendizabal y Juan Carlos Ioldi. Denunciaron que, una vez más, la sombra del «pucherazo» planea sobre la pugna electoral en ciernes. Un tongo que con la decisión del Tribunal Supremo de anular todas las listas de Abertzale Sozialistak genera «un escándalo político de mucha gravedad», porque «lo que se prohíbe son las ideas de muchos ciudadanos».
«Estamos ante una grave agresión contra la democracia y ante un pucherazo del PSOE resultante de un pacto con el PNV», prosiguió con dureza Aierbe, para quien es más que evidente que tras «este circo jurídico» existe una «decisión política». «El PSOE ha hecho todo lo posible para dejar fuera a la izquierda abertzale utilizando, según sus propios intereses, los instrumentos jurídicos y de Estado», sentenció.
Constató que esta dinámica de ilegalizaciones supone una clara agresión contra la democracia y reclacó que en Europa sería «imposible» que ocurrieran «la mitad de las cosas que suceden aquí». La izquierda abertzale entiende estas maniobras como actos de sabotaje contra el proceso, promovidas por los partidos que forman «el bloque del no»: PSOE y PNV, ya que de esta forma ambas formaciones «dicen no a un proceso democrático; no a la solución del conflicto».
La izquierda abertzale, en cambio, pretende concurrir a las elecciones para impulsar el proceso de soluciones democráticas, a pesar del PSOE y del PNV. Y es que señalaron que la formación jeltzale también anhela un mapa político sin la presencia de la izquierda abertzale para, «sin obstáculos de nadie, engordar sus negocios propios, para cultivar modelos neoliberales y para tomar decisiones cada vez más alejadas de los intereses de los ciudadanos». Acto seguido acusó a la formación jeltzale de ser «el Partido del Negocio Vasco».
Al respecto, Aierbe advirtió tanto al PSOE como al PNV de que no aceptarán «sus instituciones antidemocráticas», ni que entorpezcan el trabajo que los electos y concejales de la izquierda abertzale realizan y vayan a desarrollar en todos los pueblos.
La llamada Plataforma Libertad se concentrará ante ayuntamientos con el lema «ETA fuera de las instituciones», y el Foro Ermua ha reclamado a las FSE que hagan nuevos informes sobre supuestas conexiones entre ANV y Batasuna.
REAcciones EN MADRID
PSOE y PP elevaron ayer el tono de su cruce de reproches y acusaciones sobre si se ha sido lo suficiente y legalmente contundente a la hora de impedir la participación de candidaturas de la izquierda abertzale en las próximas elecciones municipales y forales. El eje del enfrentamiento es si el Gobierno español y la Fiscalía debían haber demandado la ilegalización de ANV y no la de algunas de sus listas, aunque sean la mayoría y afecten a más del 80% del censo de Hego Euskal Herria. La discusión es, por lo demás, la amplificación de la que la que durante el fin de semana mantuvieron los dieciséis magistrados que componen la Sala del 61 del Tribunal Supremo. Diversos medios hablan de la «altura jurídica» que tuvo la polémica, que no se centró en salvaguardar los derechos de una parte importante de la ciudadanía vasca, sino en si procedía intentar abrir un proceso de ilegalización de ANV y en el tamaño de la bofetada al Ejecutivo de Zapatero que debía contener la sentencia por no haber empleado los cauces debidos para afrontar esta situación.
El trámite de prohibición de las candidaturas de AS se resolvió con facilidad, ya que el Tribunal Supremo tiene experiencia y jurisprudencia en la materia. Más tortuoso fue el camino que debió seguir la impugnación de listas de ANV, porque a los miembros del Alto Tribunal, en general, lo que les pedía el cuerpo era acabar con todas sus listas y, de paso, enviarle un «recado» a Zapatero.
Según se ha publicado, la primera dificultad se dio al poco de que la Abogacía y la Fiscalía presentaran sus escritos, cuando el magistrado Manuel Marchena, del ala derechista de la Sala, propuso que no se admitieran las demandas, por emplear la vía de la Ley Electoral y no la de la Ley de Partidos. Un bofetón demasiado estruendoso al entender de la mayoría de jueces, que optaron por pedir a la Fiscalía y a la Abogacía del Estado que recondujeran sus demandas hacia la ejecución de sentencia por fraude de ley. Quedaba claro que el objetivo, también del Tribunal Supremo, era buscar la fórmula para cercenar listas.
Luego la pugna jurídica derivó primero hacia la posibilidad de plantear de oficio la ilegalización de ANV, y después el intento se tradujo en la propuesta de anular todas las listas, también las no impugnadas. La mayoría de la Sala entendió que no cabía ir más lejos de la petición de la Fiscalía y la Abogacía. Pese a ello, en un primer borrador de sentencia se incluyó alguna alusión al respecto que originó la protesta de los magistrados José Luis Calvo y Fernando Ledesma, considerados ambos del sector «progresista».
La imposibilidad de ir más allá de las peticiones y la forma de hacer patente su malestar por ella fue la que llevó más horas de discusión al Tribunal Supremo. Había quien quería dejar claro que se tenía que haber pedido la ilegalización, incluyendo un cierto reproche por no haberlo hecho. La mayoría se inclinó finalmente por dejar constancia de que el Tribunal no podía superar lo pedido por la Fiscalía y la Abogacía. Según algunas fuentes, el presidente del TS, Francisco José Hernando, llegó a amenazar con la redacción de un voto particular si no se dejaba constancia de las limitaciones con las que habían trabajado. La cuestión se resolvió con tres líneas redactadas por Ricardo Enríquez señalando que «éstas son las pretensiones ejercitadas en este proceso y, en consecuencia, éste es el ámbito al que debe limitarse nuestro enjuiciamiento de acuerdo con las exigencias del principio dispositivo». Además, en el texto final se coló un párrafo de un borrador anterior apuntando que la vía para actuar en este caso era la solicitud de ilegalización.
Este párrafo y una interpretación forzada de alguna agencia, que después tuvo que rectificar, elevaron la fuerza del tirón de orejas que el TS pretendía dar al Ejecutivo y se convirtieron de nuevo en arma electoral en manos del PP.
El secretario general de este partido, Angel Acebes, acusó ayer al Gobierno de «atar de pies y manos» a la Justicia y de permitir que «ETA-Batasuna-ANV vuelvan a las instituciones». El PP quiere que esta cuestión sea un eje de campaña. De hecho, Mariano Rajoy pidió la celebración de un pleno extraordinario en el Congreso la próxima semana, entre mitin y mitin. No parece que ningún grupo vaya a apoyar sus pretensiones.
Entre tanto, desde el Gobierno y el PSOE se insiste en que el auto del Tribunal Supremo, en realidad, viene a dar la razón a la vía utilizada por el Ejecutivo. Así se pronunció José Luis Rodríguez Zapatero en privado ante la dirección de su partido, y lo repitió después en público el secretario de Organización, José Blanco.
Una vez más, el debate entre PP y PSOE en relación a Euskal Herria se centra en quién de ambos partidos ha sido más duro. Desde los ámbitos cercanos al Gobierno se recuerda, por ejemplo, de que en esta ocasión se han impugnado más candidaturas que hace cuatro años con Aznar, o que el Ejecutivo del PP no hizo tampoco nada en su día para ilegalizar en su día a EHAK.
Iñaki IRIONDO
