El dirigente de la izquierda abertzale Arnaldo Otegi saludó ayer al mediodía la clarificación que supone el discurso ofrecido por la mañana por el presidente del EBB, Josu Jon Imaz, en Madrid. Apenas dos horas después de la polémica intervención en los desayunos de Europa Press, con cierta ironía Otegi agradeció «enormemente» el «streap-tease político» del mandatario del PNV, y consideró que deja meridianamente claro el interés de los jeltzales por mantener el status quo actual para seguir manteniendo sus cotas de poder y de gestión económica. «La alternativa de proceso de este señor es pactar con Mariano Rajoy si gana las elecciones», prosiguió Otegi con cara de asombro. Y alertó de que para defender el interés de su partido Josu Jon Imaz «está dispuesto a que se alargue el conflicto, porque mejor la guerra que perder la hegemonía política».

Otegi, que compareció en Donostia junto al también mahaikide Joseba Permach, compuso la rueda de prensa a partir de las declaraciones que el presidente del PNV realizó a primera hora de la mañana en Madrid y en las que, además de «insultar» a la izquierda abertzale, afirmaba que su formación estaría dispuesta a pactar con el PP en caso de que venciera las elecciones generales españolas del próximo año. Dijo que da a entender, además, hacia dónde se dirige ahora la estrategia jeltzale.

Aunque el portavoz independentista arrancó la comparecencia detallando los pormenores de la coyuntura política actual, empleó lo que denominó como «streap-tease» de Imaz para realizar un ejercicio más pedagógico sobre la responsabilidad de las distintas sensibilidades políticas en que a día de hoy incluso el diálogo político esté paralizado. Mencionó cómo la izquierda abertzale lleva varias semanas expresando su honda preocupación por ello y ayer incidió en que tras los últimos acontecimientos relacionados con la pugna electoral su inquietud va en aumento.

La clave, el no al Anaitasuna

Para no dejar lugar a dudas y para situar la razón para que el dirigente del PNV compareciera de esa guisa en la capital del Estado español, el mahaikide se remontó a la propuesta política para un marco democrático que la izquierda abertzale presentó en el Pabellón Anaitasuna de Iruñea y sobre la que ya han reiterado, por activa y por pasiva, que resolvería de forma definitiva el contencioso político y armado en Euskal Herria.

Recordó que la propuesta pivota sobre cuatro puntos «absolutamente democráticos» y a los que la izquierda abertzale entiende que «no les pueden decir que no». Un plan que parte de la actual situación de partición territorial de Euskal Herria y de las instituciones resultantes; que plantea un marco llamado de autonomía política que agruparía los cuatro territorios vascos de Hego Euskal Herria; que cada territorio decidiría libremente su integración o no en la misma; y que recogería el derecho de su población a decidir su futuro sin injerencias.

Otegi invitó tanto al PSOE como al PNV a que expresen en público, como, según el mahaikide, ya lo han hecho en privado, su negativa a alcanzar un acuerdo político para solucionar el conflicto en torno a las claves de esta iniciativa. Adelantó que «no se atreven» a ello, porque «no le pueden decir que no a esta propuesta. Y es por esto, y por nada más, por lo que el diálogo político está en suspenso», concretó Otegi.

A partir de este punto, el representante de la izquierda abertzale se centró en exclusiva en desgranar la intervención del presidente del EBB del PNV en Madrid y las conclusiones que extraen de ella. Con un poco de sorna e ironía, y ante la negativa de los líderes jeltzales a retratarse ante la sociedad vasca, Otegi tomó ese testigo y expresó el porqué, a su juicio, el PNV dice no a la resolución del conflicto.

«Seguir en las poltronas»

Consideró que el único interés del PNV de Imaz es «seguir en las poltronas de la CAV», y destacó que «un Parlamento autónomo de los cuatro territorios provocaría la pérdida de su hegemonía política». «Por tanto, mejor la guerra que perder la hegemonía política», agregó.

En esta línea, Otegi aseguró que la intención del PNV, con la ayuda del PSOE, es la de «renovar» por otro cuarto de siglo «el negocio que pactó con el Estado hace 25 años, y es por ello que se esfuerza en que se hable de ETA y no de las raíces del conflicto». Otegi fotografió así la situación actual y apeló a la honestidad para que la formación jeltzale asuma ante la sociedad vasca que «éstas son las razones de que estemos como estamos».

«¿Por qué no hay mesa de diálogo con luz y taquígrafos?», insistió de nuevo. «Porque no se atreven a retratarse», prosiguió Otegi. Y dicho esto, decidió agradecer al dirigente jeltzale que hiciera en Madrid lo que se niega a manifestar en Euskal Herria: desnudar la estrategia de su partido.

«Hay que agradecer enormemente al señor Imaz que haya dicho cuál es la alternativa del EBB», ironizó el mahaikide. Y recordó, al hilo de ello, que todas las formaciones políticas, además de rechazar la propuesta política de la izquierda abertzale para la superación del conflicto, no han planteado hasta el día de hoy alternativa alguna.

Como punto más llamativo, Josu Jon Imaz anunció desde los desayunos de Europa Press que su formación no descarta pactar con el Partido Popular en el caso de que su líder, Mariano Rajoy, fuera elegido como nuevo presidente español en la pugna electoral del próximo año. Una afirmación que ocasionó una cas-. cada de reacciones en Euskal Herria y el conjunto del Estado español y que Otegi esgrimió como la mejor muestra de la labor que ha realizado el PNV hasta la fecha en el desarrollo del proceso político. «La alternativa de proceso de este señor es pactar con Mariano Rajoy si gana las elecciones, claro, porque el PNV sólo pacta con los que ganan las elecciones», señaló.

Por ello, se preguntó «si este señor quiere hacer creer a alguien en este país, aparte de insultarnos, de que quiere hacer un proceso de soluciones democráticas. ¿A quién quiere engañar?», añadió. En el mismo tono entre irónico y enfadado, Arnaldo Otegi saludó que Imaz «por fin ha dicho una verdad, ha dicho que éste es su proyecto político». Y consideró, al hilo de ello, que el discurso de Madrid manifiesta igualmente que «para defender este proyecto político, está dispuesto a que no haya proceso democrático, a que no haya proceso de soluciones y a que se alargue el conflicto en este país».

La nueva hoja de ruta jeltzale

Y es que el presidente del EBB también oficializó en Madrid la hoja de ruta que plantea el PNV. Una senda que recogería cuatro puntos: la condena del «terrorismo»; la defensa de las FSE y la vía policial; la defensa de las «víctimas del terrorismo»; y el concepto de que la violencia y la política no son compatibles, con la exigencia de abandono de la lucha armada como premisa para cualquier avance dialogado.

Arnaldo Otegi se mostró seguro de que la base social del PNV no comparte esta estrategia, aunque matizó que sí lo hacen «las élites económicas, con las que este señor tiene un pacto».

«Y con eso, los vascos y las vascas, como dice el lehendakari, viviremos felices en el Estado de Bienestar, y seguiremos siendo españoles y franceses nos guste o no», concluyó Otegi.

Con la noticia que recogía un medio de comunicación digital sobre el discurso de Imaz encima de la mesa, Otegi hizo hincapié además en que el PNV está alejando el rumbo de Euskal Herria para centrarse en «cautivar» al Estado español, término usado por el propio Imaz hace meses y cuestionado por otros líderes jeltzales.