Serbia asumirá mañana la presidencia rotatoria del Comité de Ministros del Consejo de Europa, el Ejecutivo de esta organización, por un periodo de seis meses, mientras se suceden las críticas al nombramiento de Tomislav Nikolic, del Partido Radical Serbio (SRS), como presidente del Parlamento de Belgrado.

San Marino, que actualmente preside este organismo con sede en Estrasburgo, dará el relevo a Serbia, siguiendo un estricto orden alfabético. Posteriormente, el ministro de Exteriores serbio, Vuk Draskovic, se dirigirá a los asistentes.

En esa misma sesión, se procederá a la admisión de Montenegro como miembro de pleno derecho del Consejo de Europa.

El secretario general del Consejo de Europa, Terry Davis, mostró su preocupación por el nombramiento de Nikolic como presidente de la Cámara de Belgrado por «pertenecer a un partido asociado a criminales de guerra (Vojislav Seselj, preso en La Haya) y no respetar los valores que defiende el Consejo de Europa». De hecho, el sábado estaba previsto un acto protocolario en Belgrado para celebrar la presidencia serbia, pero fue suspendido por orden directa de Davis. El SRS fue el partido más votado en las elecciones serbias de enero.

La Presidencia alemana de la UE también criticó el nombramiento de Nikolic e hizo un llamamiento a los partidos afines a los planteamientos de la UE a formar Gobierno en Serbia antes del plazo establecido.

La OTAN, que bombardeó Belgrado y otras ciudades serbias en 1999, también criticó el nombramiento de Nikolic y destacó que «quisiéramos ver cuanto antes la formación de un Gobierno que prosiga el camino hacia la integración euroatlántica de Serbia», declaró su portavoz, James Appatrhurai.