Un camión-bomba mata al menos a 50 personas junto a la sede del PDK
Al menos medio centenar de personas murieron y 115 más resultaron heridas tras la explosión de un camión-bomba junto a la sede del Partido Democrático del Kurdistán (PDK) en Majmur, ciudad del norte de Irak cercana a Erbil, la capital del Kurdistán iraquí. Este no fue el único atentado ocurrido ayer, en una jornada en la que la alianza Estado Islámico en Irak se atribuyó el secuestro de tres soldados de EEUU.
GARA |
Más de sesenta personas murieron ayer en Irak como consecuencia de dos nuevos atentados cometidos contra objetivos civiles. El más grave tuvo lugar frente a las oficinas del Partido Democrático del Kurdistán (PDK), en la localidad de Majmur, donde murieron 45 personas y 115 más resultaros heridas a raíz de la explosión de un camión-bomba. En el otro, ocurrido en el popular mercado bagdadí de Sadriyah, fallecieron 17 personas.
En Majmur, el conductor de un camión lleno de explosivos se estrelló contra la sede del PDK, donde estaban reunidos decenas de sus miembros, en la que hizo detonar las cargas que llevaba, matando a 50 personas -entre ellas el jefe local de Policía- e hiriendo a 115. Algunos de los heridos se encontraban en estado muy grave por lo que el número de víctimas mortales podría aumentar.
La explosión causó daños a los edificios cercanos, incluidas las oficinas del alcalde de la localidad, Abdul Rahman Delaf, un conocido escritor kurdo que resultó herido, informaron fuentes médicas y de seguridad.
El líder del PDK, Massud Barzani, es el actual presidente de la región autónoma del Kurdistán iraquí. Aunque Majmur no se encuentra exactamente en esta región, la mayor parte de su población es kurda.
El relativamente tranquilo territorio del Kurdistán ha visto cómo en las últimas semanas la violencia entre chiíes y suníes que azota Irak ha traspasado sus límites. De hecho, hace cinco días, otro camión-bomba cargado con 800 kilos de TNT estalló frente al Ministerio kurdo de Interior y causó al menos una veintena de muertos y más de cien heridos en la capital del Kurdistán iraquí, en Erbil, a 50 kilómetros de Majmur.
El atentado de Bagdad fue cometido sobre las 14.45 (dos horas menos en Euskal Herria) en la plaza Wathba, cerca del mercado de Sadriyah, una de las principales zonas comerciales de la capital. El coche-bomba mató a 17 personas e hirió a otras 46, según informó la Policía iraquí.
Sadriyah ha sufrido ya dos atentados atribuidos a grupos suníes que intentan hacer descarrilar el plan de seguridad estadounidense e iraquí puesto en marcha en la capital hace más de tres meses y cuyo fracaso lo ponen de manifiesto los atentados que la capital sufre a diario. El pasado 19 de abril, la explosión de un camión-bomba en este mercado se saldó con 140 muertos y 150 heridos.
«Brigadas especiales»
La alianza Estado Islámico de Irak, encabezada por la célula iraquí de Al Qaeda, reivindicó ayer en un comunicado difundido a través de internet el secuestro de tres soldados estadounidenses que se encuentran desaparecidos desde el ataque perpetrado el sábado contra una patrulla cerca de Mahmudiya, en el que murieron cuatro militares y un intérprete iraquí. Sin embargo, la organización no aportó pruebas que sustentes esa reivindicación. El portavoz militar estadounidense en Irak, el general William Caldwell, por su parte, aseguró que 4.000 soldados de EEUU participan en la búsqueda de los tres desaparecidos en el llamado «triángulo de la muerte», al sur de la capital.
Además de atribuirse la acción, el Estado Islámico de Irak anunció la creación de «brigadas especiales de un nivel muy alto de preparación física y bélica» para combatir contra las tropas de ocupación y el Gobierno colaboracionista iraquí. Resaltó que su misión será «realizar redadas, infiltrarse en la retaguardia del enemigo y tomar prisioneros».
Hombres armados irrumpieron en una abarrotada calle de Baquba, donde mataron a tiros delante de la multitud a dos personas esposadas, como advertencia de que ése será «el destino de los traidores», en referencia a quienes cooperan con EEUU.
El Ministerio iraquí del Interior ha prohibido a los periodistas acercarse o tomar fotografías donde se registran explosiones hasta que las fuerzas de seguridad se hagan con el control de los lugares afectados por las bombas.
El Ministerio de Asuntos Exteriores iraní aseguró ayer que Irán ha aceptado una propuesta formal de EEUU para hablar sobre la seguridad en Irak en el curso de un próximo encuentro en Bagdad, según informó la agencia oficial IRNA. Según la agencia, Irán había recibido la propuesta a través del embajador suizo en Teherán, quien suele ejercer de mediador para EEUU en este país.
«Irán ha dado su acuerdo a estas negociaciones tras consultar con las autoridades iraquíes con el objetivo de reducir el sufrimiento del pueblo iraquí, apoyar al pueblo iraquí y establecer la seguridad y la paz en Irak», declaró el portavoz, Mohammed Ali Hosseini, citado por la agencia IRNA.
Poco después, una portavoz del vicepresidente estadounidense, Dick Cheney, aseguró que su país está dispuesto a iniciar conversaciones con Irak siempre y cuando éstas se limiten al tema de la seguridad en Irak.
«Estamos dispuestos a mantener conversaciones restringidas al tema de Irak y a nivel de embajadores», afirmó, Lea Anne McBride, quien añadió que esta postura no es nueva, sino que refleja la que ya tenía anteriormente EEUU.