GARA > Idatzia > Eguneko gaiak

ELECCIONES EN EUSKAL HERRIA

«No pienso utilizar la ikurriña para enfrentar a los pamploneses»

Uxue Barkos

Candidata de Nafarroa Bai al consistorio de Iruñea

I.V. | IRUÑEA

Ya ha dicho por qué hay que echar a Barcina, pero ¿para qué?, ¿qué cambiaría?

El para qué es la explicación y el fundamento del porqué. Si no, no tendría mucho sentido la mera alternancia de siglas en el poder. Fundamentalmente, para cohesionar una sociedad enormemente desestructurada, una ciudad que tiene déficits serios de convivencia, sobre todo en términos de convivencia social. ¿Para qué? Para cambiar Pamplona, por descontado.

Supongamos que UPN gana pero hay votos para hacer una alternativa. ¿Nafarroa Bai reclamaría la Alcaldía?

Lógicamente, Nafarroa Bai va a ponerse a trabajar por ese cambio el día 28 con las herramientas que les permitan los votos en las urnas. Nuestra prioridad es un cambio en el conjunto de las instituciones de la comunidad. Por ello, tanto en el Gobierno como en los ayuntamientos decidiremos aquello que permita un cambio más acorde con lo que demanda la ciudadanía. Creemos que el poder en las instituciones ni es el objetivo prioritario ni puede ser algo ajeno a lo que decidan los ciudadanos el próximo domingo.

Fernando Puras ha dicho que ANV no va a condicionar la próxima Alcaldía en Iruñea. Si NaBai necesita los votos de ANV para llegar a ella, ¿negociaría con esta fuerza?

Hablar se habla con todo el mundo. Por lo tanto, no comprendo por qué alguien puede negarse a hablar con nadie. Hemos visto que muchas instituciones, no sólo aquí sino en la Comunidad Autónoma Vasca, han sufrido el hostigamiento de elementos bien definidos por sentarse a hablar con formaciones ilegalizadas, pero, por lo visto, también se quiere llegar a formaciones legales. ANV es una formación legal, y es evidente que hay que sentarse a hablar con ella. A partir de ahí, no me atrevo a aventurar el resultado de esas conversaciones, porque ni sé si Nafarroa Bai va a estar en posición o en indisposición de poder hablar en términos de conformar o liderar una alternativa al Gobierno de UPN, ni sé si el resto de las formaciones estarían en disposición de hacerlo. Creo que todos los que seamos capaces de conformar un cambio debemos intentar hacerlo. A partir de ahí, luego están los principios y los programas de cada una de las formaciones que tengamos representación municipal, y nos tendremos que sentar a negociar desde esas posiciones.

¿Cómo explica a sus votantes que no va a poner la ikurriña en el balcón municipal durante los sanfermines?

Diciendo claramente que UPN nos ha dejado inoculado un enfrentamiento de símbolos y que tenemos la necesidad de superar ese enfrentamiento. Yo no pienso utilizar la ikurriña como Yolanda Barcina ha utilizado la bandera española. No utilizaré un símbolo, para mí querido, para enfrentar a los pamploneses. Me parece una actitud absolutamente rastrera. Digo más: no permitiré que otros utilicen la ikurriña como coartada para negar a esta ciudad la posibilidad de un cambio de progreso y lograr la cohabitación y convivencia de identidades. Hablo del balcón del Ayuntamiento. Evidentemente, la expresión de la ciudadanía estará en la calle y en otras muchas dependencias municipales, en las que no se tratará de un emblema del conjunto de la ciudadanía. En mi despacho, bien en el de la alcaldía o en el de la oposición, estarán aquellos símbolos que yo considere más queridos por mí. Eso, por descontado. Pero en estos momentos nosotros debemos demostrar a la derecha navarra que hacemos nuestro algo fundamental, como es que el balcón del Ayuntamiento de Pamplona es de todos los pamploneses y que no vamos a utilizar determinados símbolos como ellos sí han hecho para enfrentar a los hombres y mujeres de esta ciudad.

¿Qué es lo que más le preocupa en esta ciudad?

Muchas cosas, pero si hubiera que expresar una preocupación global, diría que es la falta de ambición para hacer de Pamplona una ciudad internamente solidaria, cohesionada y en convivencia. Creo que existe una fractura de convivencia clara, una fractura social. Después de la gestión de Yolanda Barcina durante ocho años, Pamplona es una ciudad escaparate, pero que esconde bolsas de profunda pobreza. Tenemos que ser capaces de ordenar la trastienda.

Barcina ha dicho que con ANV vuelven los terroristas al Ayuntamiento. ¿Qué opina de esta declaración?

Que Yolanda Barcina está empeñada desde hace una semana en hacer campaña de ANV por una razón, porque ha descubierto que puede hacer de ANV su llave al gobierno municipal. Desde luego, en estos momentos es su mejor publicista.

ANV ha sido excluida de la mayor parte de los debates electorales. ¿Cómo lo valora y qué opina sobre que esta fuerza sea legal en el Ayuntamiento e ilegal en el Parlamento?

A eso deben responder la Fiscalía General y la Abogacía del Estado. Nosotros ya hemos dicho que estamos en contra de la Ley de Partidos, que es una ley absolutamente antidemocrática y que vamos a seguir trabajando con otras fuerzas para derogarla. Estamos convencidos de que, junto a partes importantes del Partido Socialista, conseguiremos derogar esa ley. Cuanto antes la deroguemos, mejor, porque mientras tanto hace enor- me daño. Es inadmisible que haya voces que se queden fuera de las instituciones cuando cuentan claramente con una posibilidad de representación. Y lo afirmo con la misma fuerza y contundencia que digo que hay personas que no pueden presentarse en las listas de otros partidos porque se sienten amenazadas. Cualquier forma de presión para la presencia de una voz de los ciudadanos en las instituciones demuestra que hay democracias que todavía tienen mucho que recorrer.

¿Considera legítimas unas elecciones que prohíben listas electorales de una fuerza política?

Considero esta situación absolutamente contraria a una democracia sólida y con proyección de futuro.

¿Cree que existe un conflicto político en Euskal Herria? ¿Cómo se podría solucionar?

Por descontado que existe un conflicto político, pero existen otros muchos conflictos. En primer lugar tenemos un problema de violencia serio que hay que resolver. Hay un problema de violencia intrínsecamente relacionado con nuestro devenir político y con una historia convulsa políticamente hablando, pero me parece fundamental establecer prioridades. Hay cuestiones importantes, y algunas de ellas más urgentes. En estos momentos, lo más urgente en el conjunto de Euskal Herria es la consecución de la paz.

Imprimatu 
Gehitu artikuloa: Delicious Zabaldu
Igo