Woody Allen inició ayer mismo, un día después de instalarse en Barcelona, un recorrido por la Ciudad Condal para estudiar personalmente los escenarios y localizaciones de la que será su próxima película, entre ellos uno de los símbolos de la ciudad, como es el templo de la Sagrada Familia.

El director de cine neoyorquino efectuó por la tarde una breve visita a la Sagrada Familia, uno de los monumentos barceloneses que con toda seguridad aparecerán en el filme. No en vano, el argumento de la película, aún sin título, girará en torno a las vacaciones de una turista norteamericana (Scarlett Johansson) en Barcelona y las relaciones que establece con algunos de sus habitantes, especialmente con un barcelonés que interpretará Javier Bardem.

Woody Allen se presentó en la Sagrada Familia hacia las 17:45 horas, sin previo aviso, acompañado por un reducido equipo de la productora de la película. Allen abandonó el emplazamiento a la búsqueda de otros lugares emblemáticos de Barcelona que aparecerán en su película, una labor en la que su equipo de producción ya lleva trabajando varias semanas. Así, las boutiques del céntrico Paseo de Gracia que han sido preseleccionadas para aparecer en la película aguardan ya la inminente visita del cineasta para que personalmente les confirme su participación en el rodaje del filme a partir del próximo julio. Lujosas tiendas como Chanel o Adolfo Domínguez han sido elegidas por la productora para enmarcar alguna de las escenas que dirigirá Allen.

El cineasta se ha instalado en el Hotel Arts junto a su esposa, Soon Yi, y sus dos hijas, Brechet y Manzie Tio.