La Banca Etica Fiare, agencia financiera que actúa bajo licencia de la banca Popolare Etica de Italia, presentó ayer la campaña de captación de socios que con sus aportaciones hagan posible convertir la agencia en cooperativa de crédito. Para ello necesita recaudar ocho millones de euros, lo que pretende lograr para el año 2010. Su intención es, asimismo, impulsar el proyecto a nivel europeo, para lo cual trabaja con grupos de diferentes países.

En un campo como el de las fianzas la palabra ética puede resultar contradictoria, dada la práctica ordinaria de las entidades bancarias. La Banca Etica, sin embargo, parte del principio de que la economía ha de estar al servicio de la justicia social. De ahí que el objetivo sea impulsar el desarrollo de personas y pueblos, especialmente de los más desfavorecidos; es decir, apoyar empresas y proyectos sociales, medioambientales, culturales y humanitarios facilitando recursos a las personas más pobres, así como a las organizaciones que se dedican a la ayuda para esas personas. El inversor, por su parte, tiene la posibilidad de apoyar esa actividad y de decidir la utilización que el banco hace de su dinero. Ciertamente, no se trata de un banco al uso, donde la maximización del beneficio se antepone a las personas, y es una de las excepciones que en el mundo de las finanzas procuran un hueco a la ética, .