ACB El Baskonia cae eliminado ante el Barcelona
La «ansiedad Baskonia» vuelve a visitar un Zurbano crispado
Dusko Ivanovic, el último entrenador con plena confianza de la cancha baskonista, rompe su gafe en el quinto partido y clasifica para la final a un Barcelona muy superior al Tau a partir de un tercer cuarto en el que los locales se diluyeron ante la calidad exterior culé
TAU BASKONIA 79
BARCELONA 95
Jon ORMAZABAL | GASTEIZ
«La ansiedad Baskonia» volvió a pasearse por un Zurbano crispado desde hace ya mucho tiempo y el Tau más ambicioso en lo económico se despidió ayer de la ACB volviendo a ofrecer una imagen muy blanda ante un Barcelona superior, pero sobre todo mucho más identificado con una idea. Desde la salida del equipo de un Dusko Ivanovic que rompió ayer su gafe con el quinto partido, el Baskonia no ha creído realmente en su proyecto y Boza Maljkovic pagó ayer la indefinición de tres años demasiado largos, cuando no toda la responsabilidad puede caer en el cuarto técnico en cuatro años cuando la estabilidad había sido la seña de identidad del club en un crecimiento no demasiado bien asumido.
En la repetición de un guión repetido tantas veces, el Baskonia volvió a diluirse en el tercer cuarto en cuanto vio que un Scola que se despidió como si se acabara un ciclo no acertaba con el aro contrario y ni siquiera la quinta falta de Navarro a falta de más de quince minutos, fue aprovechada para, al menos, competir en el último cuarto.
El desgaste desde el primer minuto fue brutal, con una intensidad y una tensión digna de cualquier final, desgastándose sin concesión. Dos triples de Erdogan dieron las primeras ventajas al Baskonia, pero sin suponer rentas importantes, ya que las canastas imposibles de Juan Carlos Navarro les permitieron seguirles de cerca.
Salvo un pequeño atasco al comienzo del segundo tiempo, el Baskonia pareció mejor a pesar del empate a 38 en el descanso, pero la calidad de sus exteriores permitió al Barcelona resistir, pese a cargarse de faltas.
Debacle tras el descanso
En la reanudación, mientras Scola seguía sin ver aro y el juego exterior desaparecido, Navarro y Basile seguían anotando todo lo que les llegaba y, con 12 puntos consecutivos, abrieron brecha con el agravante de que una técnica a Roe les permitió superar la barrera de los diez, ante una mala zona.
Las esperanzas parecieron renacer de inmediato, cuando Navarro quedó fuera de juego por una técnica tras personal en ataque que suponía su eliminación por cinco faltas, pero dos triples consecutivos de Grimau y Lakovic supusieron el principio del fin de este Baskonia.
El último cuarto fue la repetición más prolongada de las despedidas de las últimas temporadas ante Real Madrid y Unicaja, con Maljkovic como saco de los golpes de la frustración.
Boza Maljkovic fue el centro de todas las críticas del público tras la eliminación del Baskonia en semifinales, pero el técnico serbio se mostró muy sereno y tranquilo en la rueda de prensa tras el partido. El entrenador se mostró dispuesto y con ganas de seguir en el equipo con el que tiene un año más de contrato, pero reconoció que es una decisión que no depende de él.
Maljkovic se excusó explicando que él estaba tranquilo porque lo había dado todo e insistió en que no ha guardado ni un gramo de esfuerzo desde el primer día en el que llegó «porque no conocía el equipo. Yo puedo dormir tranquilo».
En su análisis del partido, el preparador baskonista achacó la derrota a que no «hemos acertado en los tiros que en entrenamiento y en otros partidos sí hemos metido».
Dusko Ivanovic, por su parte, se mostró feliz por la victoria y destacó que su mayor paciencia les dio el triunfo aunque también mostró su pesar por la tristeza del público local. También salió en defensa de su buen amigo Boza Maljkovic, ante las críticas del público.
J.O.
El escolta catalán y Basile rompieron el partido en el tercer cuarto y ni siquiera su expulsión por la quinta falta tras una técnica fue suficiente para que un Baskonia que no sabe jugar por detrás del marcador reaccionara en un final muy duro.
Como en Atenas, Boza Maljkovic fue el objetivo de todas las críticas de la afición, mientras que los jugadores terminaron siendo ovacionados, con síntomas de despedida en el caso de Serkan Erdogan y Luis Scola.