La última jornada de la Liga 06/07 se presentaba apasionante, con prácticamente todo por decidir por arriba y por abajo. Y lo fue, porque el movimiento en los marcadores se fue traduciendo también en movimientos en la clasificación a lo largo de la tarde, pero lo cierto es que todos los equipos empezaron como acabaron.

Es decir, con el Real Madrid celebrando su 30º título en La Cibeles, el Barcelona intentando comprender cómo ha perdido una Liga que hace unos meses parecía tener ganada de calle, Sevilla y Valencia consolándose con la Champions, y Zaragoza y Villarreal celebrando su pasaporte europeo. Por debajo, otro tanto de lo mismo: Nástic, Real y Celta empezaron la jornada como equipos de Segunda y la concluyeron de la misma forma.

Lo cierto es que el título fue blaugrana durante buena parte de la noche para, como sucediera la jornada anterior, volar a Madrid en los últimos minutos. Y es que mientras el Barcelona hacía sus deberes de sobra -despidió la temporada con una goleada en Tarragona-, al Real Madrid le tocó sufrir de lo lindo.

Ya fuera por las supuestas primas -se hablaba de una cifra récord de hasta tres millones de euros- o por lo mal que había sentado la famosa vuelta al ruedo de Ramón Calderón en La Romareda, pero lo cierto es que el Mallorca saltó al Bernabéu con ganas de dar la sorpresa y estuvo a punto de hacerlo gracias al gol que marcaba Varela en el minuto 16.

A los merengues, que además perdieron a Van Nistelrooy por lesión, les tocó sufrir, mientras el Barça se crecía gol a gol y minuto a minuto. Hasta que las tornas volvieron a cambiar: los culés todavía eran campeones en el 67, cuando Reyes firmaba el empate en el Bernabéu, pero las puertas del cielo se les cerraron en los diez últimos minutos, con los goles de Diarrá y, de nuevo, Reyes.

Una reacción, en definitiva, como la que ha protagonizado el propio Real Madrid a lo largo de toda una temporada que comenzó en crisis y ha concluído de fiesta. Todo lo contrario de un Barcelona, que se ha quedado sin ninguno de los títulos a los que aspiraba.

También se quedó con las ganas el Sevilla, aunque el equipo andaluz se consuela con su título de UEFA, la final de Copa que disputará la próxima semana y el billete para la Champions, en cuya ronda previa acompañará al Valencia.

También terminaron satisfechos Villarreal y Zaragoza, que completarán la representación de la Liga en Europa. El equipo castellonés, con seis victorias consecutivas a sus espaldas, se ha hecho con un billete para la UEFA después de haberse pasado dos tercios de la temporada peleando por evitar el descenso.

Todo lo contrario de un Atlético, al que Javier Aguirre tampoco ha salvado de su condición de «pupas» y que vuelve a quedarse fuera de Europa.