Durante el año pasado, el Consejo Económico y Social (CES) Vasco dictaminó seis de doce solicitudes, frente a una de siete del año anterior. Según Antxon Lafont, presidente del organismo sociolaboral, es un paso, ya que «no se puede hablar de la cultura del veto, como en el anterior ejercicio».

Reconoció, sin embargo, que «las cosas irían mejor» si se pudieran emitir opiniones sobre los dictámenes que no llegan a aprobarse ante la falta de consenso, «pero sería positivo conocer los porqués de cada parte». En lo que llevamos de año, se han aprobado cuatro dictámenes de los ocho presentados. Lafont insistió en la presentación de la memoria en que «es necesario reiterar la crisis que citábamos en 2005 como debida a la falta de convencimiento de la utilidad de nuestra institución , tanto por parte de la sociedad política como por parte de la sociedad civil aquí representadas. No parece, por ahora, que el aumento de actividad en 2006, constatado en el documento, conduzca a modificaciones de actitud en cuanto al fondo de los distanciamientos que constatamos hace un año».

Por ese motivo, el presidente del CES Vasco reconoce que «seguimos esperanzados en la capacidad de reacción positiva, incluso de los recalcitrantes». En su comparecencia, también destacó que una de las novedades en las actividades de 2006 ha sido la elaboración de debates, con la participación de expertos, como los relativos a la política agraria en Euskal Herria y la responsabilidad social corporativa en las empresas.

En la actualidad existen otras propuestas que se están estudiando. La más importante es la que se refiere al análisis de la política industrial en Euskal Herria. A juicio de Lafont, es necesario este debate para avanzar hacia soluciones conjuntas.

Lafont fue crítico con el futuro de la Red Transatlántica Europea (RTA), compuesta por los organismos sociolaborales del Arco Atlántico, ya que no hay financiación para continuar el trabajo. «No sabemos cómo va a quedar. En un principio, propusimos financiar desde cada organismo una actualización de los trabajos realizados, porque no sabemos la actitud que tomará la Comisión Europea». Lo que sí destacó fue que continuarán con los encuentros con Aquitania, porque «otro de los debates que tenemos pendiente es del transporte».