Tampoco este año el sector del Metal de Bizkaia tendrá convenio colectivo, porque la patronal, en una ceremonia que se repite desde 2004, ha decido dar por concluidas las negociaciones y levantarse de la mesa. La culpa, aseguran los empresarios, es de los sindicatos por querer reducir la jornada.

Así, la Federación Vizcaina de Empresas del Metal (FVEM) anunció en un comunicado la decisión, señalando que «responsablemente» daban por finalizada la negociación de 2007 «ante la situación de bloqueo de la negociación colectiva, derivada de la cerrazón de los sindicatos que continúan con sus pretensiones de reducir la jornada de trabajo».

Los empresarios dicen que «necesitamos sostener la competitividad de las empresas para asegurar el empleo y para ello no podemos reducir la jornada de trabajo que es una de las más bajas del Estado y de Europa», y recomiendan a las empresas asociadas del sector la aplicación de un incremento salarial del 3% ante la «cerrazón» de los sindicatos en su «empeño» por reducir la jornada.

Intransigencia desde 2004

Las centrales sindicales no piensan lo mismo. ELA recordó ayer que «la arrogancia, la avaricia y el mayor desprecio hacia los trabajadores, así como hacia los sindicatos que les representan, han sido las señas que han caracterizado las posturas patronales, no sólo en este año 2007, sino desde el año 2004 en que se encuentran bloqueados los convenios».

En opinión de ELA, «la postura de negarse en redondo a discutir materias como la jornada o el control de la precariedad, las discriminaciones o la subcontratación ha impedido cualquier avance en el convenio, a la vez que [la patronal] reclama más manga ancha para aplicar medidas de flexibilidad. A ello, une una propuesta salarial claramente escasa». Para ELA, además, «la patronal se siente cómoda porque en la mesa se encuentra con algunos sindicatos que ya han aceptado sus propuestas de limitación salarial y mayor flexibilidad, en el Acuerdo Nacional de negociación colectiva, firmado con la CEOE el pasado febrero».

En este contexto, ELA apuntó que en adelante, acabadas las negociaciones, trasladará las negociaciones a las empresas.

Por su parte, el responsable del Metal de Bizkaia de LAB, Alberto Cristóbal, denunció la «intransigencia» de la patronal de no querer negociar, decisión que es «algo que se esperaban», y recordó que es el cuarto año sin convenio en el Metal en este herrialde, porque desde 2004 la patronal ha dado «por cerrada» la negociación.

«Históricamente, en junio, a lo más tardar principios de julio, si la negociación no se veía que podía llegar a algo, la patronal unilateralmente daba por finalizadas las negociaciones, lanzando una recomendación de subida salarial a las empresas», señaló. Cristóbal manifestó que hay que «lanzar la pelota al tejado de quien corresponde, que es la patronal», y aseguró que las propuestas de los sindicatos han sido «diversas» y se han presentado «muchas plataformas encima de la mesa», matizando que eran «asumibles».

Así, por ejemplo, indicó que la reducción de jornada es «viable» y lo han hecho «otras patronales en otros convenios», sin que «vaya a llevar a una catástrofe». Cristóbal manifestó que la negativa de la FVEM a disminuir la jornada «se debe más a unos intereses particulares que a imposibilidad».

Alberto Cristóbal recordó que LAB se retiró de las negociaciones porque la FVEM planteaba propuestas «regresivas».

UGT, entretanto, acusó a los empresarios de «chantajear» a los sindicatos y «bloquear» la negociación para «cargarse» el convenio. Calificó de «inadmisible» que, tras haber estado cuatro años sin convenio y sabiendo la patronal que no todas las empresas siguieron las directrices marcadas, «ahora rompa la mesa de manera unilateral y condene a miles de trabajadores a no tener revisión salarial un año más». También advirtió de que las estrategias «coincidentes» de la patronal y de ELA impedían la firma del convenio.

CCOO ofreció otra visión de los acontecimientos y afirmó que «lamentablemente esta pretensión de la patronal viene avalada en parte por las actuaciones de determinados sindicatos. ELA con una actitud bloqueadora de la mesa desde el comienzo de la negociación y el abandono de la negociación por parte de LAB, han servido para que Cebek intente justificar una vez más su falta de predisposición para llegar a acuerdos».

CCOO anunció que convocará a todos los agentes de la mesa a la próxima reunión, prevista inicialmente para setiembre.