El histórico Frente Revolucionario de Timor Oriental Independiente (FRETILIN) ha ganado las elecciones legislativas del pasado sábado en Timor Leste, pero el escaso margen obtenido no le permitirá gobernar en solitario e, incluso, podría apartarle del poder, según se desprende de los datos definitivos del escrutinio de los votos. El gran beneficiado ha sido el Consejo nacional de Reconstrucción de Timor (CNRT), el nuevo partido formado por el que fuera dirigente independentista y ex presidente del país, Xanana Gusmao.

Los del sábado fueron los primeros comicios legislativos desde los tumultos del año pasado, que causaron decenas de muertos y una grave crisis de Gobierno que derivó en la dimisión del entonces primer ministro, Mari Alkatiri, del FRETILIN.

Su formación, que lideró la lucha por la independencia de Timor Leste, contra Portugal e Indonesia, ha obtenido el 29% de los votos, lo que supone una pérdida del 50% respecto a los resultados de las elecciones de 2001, en las que logró el 57%.

Los resultados de entonces se consideraron decepcionantes para el FRETILIN, ya que no le permitieron gobernar con mayoría absoluta al no ocupar los dos tercios de los escaños requeridos, y los del pasado sábado suponen un fuerte castigo para un partido al que muchos consideraban demasiado vinculado al Gobierno provisional que, bajo control de la ONU, gobernó el país entre 1999 y 2002.

En la elecciones del sábado, en CNRT alcanzó el 24,1%; la coalición formada por la Asociación Social Demócrata Timorense y el Partido Social Demócrata (ASDT/PSD), el 15,8% y el Partido Democrático, el 11,3%.

A la vista de los resultados, el presidente José Ramos-Horta (quien fuera dirigente del FRETILIN) se apresuró a defender la formación de un Gobierno de «amplio» consenso.

Mari Alkatiri, líder del FRETILIN manifestó que su partido mantiene contactos con otros bloques para tratar de formar un Gobierno de coalición, pero rechazó cualquier acuerdo con Gusmao, a quien los analistas no descartan en situar al frente del nuevo Ejecutivo.