«Hoy por hoy se aplica un convenio estatal, que establece unos salarios que rondan los 800 euros con jornadas de casi 40 horas semanales, en los que se trabaja fines de semana y festivos», manifestó ayer Mirari Irure, representante de ELA, en la concentración convocada con LAB ante la delegación de Lakua en Bilbo.

«Con estas condiciones, es imposible que en Euskadi se desarrolle una vida plena, autónoma e independiente», denunciaron en la protesta. Las reivindicaciones de estos trabajadores se han trasladado al Ejecutivo de Lakua porque, según manifestaron, las empresas que ofrecen los servicios de telemarketing son compañías como Euskaltel o Iberdrola, de origen vasco, por lo que «el Gobierno vasco indirectamente también es responsable de estas condiciones paupérrimas».

Los trabajadores de telemarketing han desarrollado hasta la fecha dos jornadas de paro de una hora y a lo largo del mes de julio realizarán concentraciones de delegados y solicitarán reuniones a las empresas en las que se desarrollan actividades de telemarketing.

Los sindicatos ELA y LAB solicitarán, además, una reunión con el Departamento de Industria, Comercio y Turismo de Lakua para intentar establecer unas pautas de colaboración y trabajo en común que nos «lleven a conseguir un telemarketing digno. Si se niegan a reunirse con nosotros, arrancaremos en setiembre con nuevas movilizaciones de un calado mayor», anunciaron.