Vecinos de Lizartza relataron a GARA que, con un gran despliegue, la Ertzaintza tomó literalmente esta localidad guipuzcoana durante la mañana de ayer. Y es que, hacia las 8.00, numerosos agentes -varios de paisano- se personaron en el municipio con motivo de una visita de la nueva alcaldesa, Regina Otaola (PP).

ANV, primera fuerza de la localidad el 27-M, denunció «contundentemente» estos hechos y aseguró que la Ertzaintza mantuvo una actitud «chulesca» con los vecinos. Como ejemplo de ello, explicó que los policías ocuparon un parking privado y que, cuando el dueño les pidió que lo abandonaran, le exigieron tanto el DNI como las escrituras. Tras volver con los documentos, esta persona fue amenazada y golpeada por los agentes.