El Ejército libanés niega que el último ataque a Nahr al-Bared dé inicio a la ofensiva final
El Ejército libanés atacó ayer con fuego de artillería el campamento de de Nahr al-Bared, pero negó que sea el inicio de la ofensiva final y señaló que busca la rendición de los combatientes de Fatah al Islam.
GARA |
Los bombardeos del Ejército libanés sobre el campo de refugiados palestinos de Nahr al-Bared se reanudaron ayer, coinci- diendo con el primer aniversario de la agresión israelí, en lo que parecía el inicio de la ofensiva final contra los milicianos de Fatah al Islam. Sin embargo, el Ejército negó en un comunicado que fuera el preludio del asalto final y afirmó que «las continuadas operaciones militares están todavía en el contexto de estrechar el cerco y tensar la cuerda a los hombres armados para forzarles a rendirse».
El ataque comenzó después del amanecer, unas horas después de que más de 160 civiles abandonaran del campamento, mientras los tanques entraban en los barrios en ruinas, donde antes de que estallaran los combates, el 20 de mayo, vivían 31.000 refugiados. Un responsable palestino que dejó el campo indicó que en él sólo permanece una decena de civiles, además de las familias de los combatientes de Fatah al Islam.
Durante la operación fallecieron seis soldados libaneses, lo que eleva a 90 el número de militares muertos desde el inicio de los enfrentamientos, a los que hay que sumar otras 88 víctimas mortales.
«Éxito»
En el aniversario del inicio de la guerra contra Hizbulah, el primer ministro israelí, Ehud Olmert, visitó la frontera entre ambos países, donde valoró aquella agresión como un «éxito» que ha convertido a Israel en un país más seguro, y ofreció a Siria el inicio de conversaciones.