Iñaki Lekuona Periodista
Algo del otro jueves
Para qué sirve un rey? La verdad, no para gran cosa. Las monarquías son viejas máquinas que consumen muchísimo pero que no producen nada. A lo sumo, hoy día las realezas cumplen un rol de retrete social donde los súbditos -o sea los contribuyentes que les pagan un sueldo millonario- deyectan las frustraciones de la vida verdaderamente real, las bilis del crédito hipotecario, las angustias del fin de mes, los sudores de las deudas, la fatiga del trabajo mal pagado... En este siglo XXI, los monarcas se han transfigurado en bufones al servicio del desahogo social.
Por eso, el secuestro de la revista satírica que sale los miércoles no es un simple acto de censura, aunque tampoco llega a la categoría de ataque a la libertad de expresión a la usanza de la Audiencia Nacional, léase toda suerte de egines o casos como el de aquel líder político juzgado y condenado por ultraje a la Corona, por haber constatado que si el Rey es el jefe supremo de las Fuerzas Armadas, es por consiguiente jefe de los torturadores pertenecientes a esas fuerzas armadas y señalados como tales en el informe del Relator contra la tortura de la ONU.
A lo que iba, que la decisión del juez instructor, a petición de la Fiscalía General del Estado y sin duda por sugerencia de la Casa Real española -vaya cuento eso de que se actuó de oficio-, es un ataque regio a eso que se da por llamar pueblo llano, a su derecho a utilizar como le plazca una figura impuesta por la que paga un riguroso y elevado impuesto año sí y año también.
¿Con qué derecho la Casa Real española que vive de gorra, que disfruta de una vida de lujos, palacios, yates, regatas, cochazos, vacaciones casi permanentes a costa de los demás, puede tomarla contra un medio de expresión por una simple bufonada? Con lo que dieron de hablar las famosas caricaturas de Mahoma, ahora resulta que en el Reino de España se eleva a infamia un caso que no es nada del otro jueves y se califica de ultraje un dibujo jocoso que no hace más que retratar la purita realidad, que no es otra que la realeza española no le pega un palo al agua y que eso de ganarse el pan con el sudor de su frente se la trae al pairo. Vaya país de tebeo.
Pues eso, a los de «El Jueves», salud y República. Y en lo que nos toca, previamente la independencia, que ser colonia de un estado republicano no es mucho más saludable.