La Jazz Band Ball refrescó el ambiente festivo de la noche del pasado martes al ofrecer una amplia paleta de sonidos con la actuación de media docena de grupos, entre los que destacaban los playeros The Skatalites y Gotan Project. Según la organización, un público de más de 26.000 espectadores -de más edad en las terrazas, más joven en la arena- desbordó el recinto que ofreció más de seis horas de música, «inauguradas» por Ann Hampton Callaway. La estadounidense recreó grandes clásicos del jazz como «My Funny Valentine» y emuló a grandes vocalistas como Billie Holliday o Ella Fitzgerald. Tras ella, el cuarteto francés Gypsy Swing y su jazz gitano.

Con una preciosa puesta de sol pisó la arena el más animado de los directos de la noche. Mitos de la música jamaicana y pioneros del ska, el lento ritmo de The Skatalites hizo mecer la playa de la Zurriola. La banda surgida en la década de los 60 se ha rearmado y últimamente se prodiga mucho en nuestros escenarios. Apoyado en la voz de Doreen Shaffer y capitaneado por el indispensable batería Lloyd Knibb, un sonriente Lester Ska Sterling -quien sólo sopla el saxo a ratos-, animó al público presentando los temas y comparando el escenario con las playas jamaicanas. La tripleta original se acompaña de animosos y jóvenes músicos. La gran ventaja de la veterana banda, que sólo ofrece una verbena de ska añejo, es que todo el mundo conoce sus temas; hoy en día clásicos imperecederos. Comenzaron, como siempre, con «Freedom Sounds» y especialmente coreada fue su recreación del tema central de la película «The Guns of Navarone» (J. Lee Thompson, 1961). Sin duda, el directo más festivo de la noche.

Nada más finalizar el agradable ska de los abuelos caribeños el orondo hacha de la guitarra blues Popa Chubby atacó con su sonido eléctrico, en formato trío, acompañado de dos jóvenes y rockeros músicos. El «rey del blues de Nueva York» se mostró comunicador, alabó la ciudad y comenzó su directo ofreciendo temas de «Stealing the Devil´s Guitar» (Blind Pig, 2006) como «Devil's Guitar», «Smugglers Game» o «Long Deep Hard and Under» y finalizó, tras homenajear a Jimi Hendrix y versionear el clásico «Hey Jo», con una selección de sus grandes éxitos, como «Hallelujah» o «If The Diesel Don´t Get You then the Jet Fuel will», incluidos en su disco en directo del 2005 «Big Man Big Guitar (Live)». Intenso set, quizás algo plano, en un abarrotado laberinto de mesas. Desbordada estaba también la carpa-sauna en la que actuó el interesante David Walters en solitario. Actualmente afincado en Marsella, el martiniqueño ofreció un animado y sorprendente directo, alternando guitarra y percusión con ritmos pregrabados en una fusión de tradición africana y bailable pulso electrónico.

La expectación del día se centraba en Gotan Project, banda parisiense/bonaerense que surgió en escena con una belleza plástica insuperable. Hieráticos y de blanco impoluto (traje ellos, vestido largo ellas), el trío original se amplió hasta una decena de músicos, con paridad de género. Al frente, guitarra, acordeón y piano. En un segundo plano, chelo, viola, dos violínes y dos djs. Destacaba el trabajo del piano y la sólida voz de Verónica Silva, en un conjunto que renueva el tango y la milonga con electrónica -recordando, salvando la distancia, al trío arrasatearra Gose-. Con repetidas alocuciones a la Plata, Argentina y Buenos Aires, presentaron su tercer largo, «Lunático» (XI Recordings, 2006) y se despidieron con una chacarena, baile del sur de Bolivia y norte de Argentina. Dicen que en Sudamérica los hombres también bailan. Aquí sorprendió que el público se mostrara tan parado y el chill out resultara tan sosito. Rizando el rizo, la noche la cerraba de madrugada el Dj Daniel Haaksman, en una carpa inicialmente prevista con ... ¡sillas!

Por otra parte, se han vuelto a agotar las entradas para ver mañana a Madeleine Peyroux -después de que se ampliara el aforo para el recinto completo del Kursaal-, así como para el concierto que Pat Metheny & Brad Mehldau interpretarán junto a Larry Grenadier y Jeff Ballard el sábado en la Trinidad. Debido a la duración de este último concierto, de más de dos horas, actuarán sin los teloneros Bojan Z, quienes pasan a tocar el mismo día en la Zurriola. El que ofrecerá el premio Donostia Jazzaldia del 2007, Wayne Shorter, para el que también se ha ampliado el aforo, aún está disponible.

En la jornada de hoy la atención se centra en el concierto de Isaac Hayes en el Kursaal y el de Marcus Miller y la Vienna Art Orchestra en la Trinidad, sin olvidar a Van Der Graaf Generator, en el Victoria Eugenia. Nacido en 1942 en Tennessee, el cantante y actor Isaac Hayes representa al sello Stax y al sonido Menphis. Pionero de la música disco y el rap, «Ultimate Isaac Hayes: Can You Dig It?» (Stax, 2005) es su último lanzamiento. Como curiosidad, comentar que es él quien pone voz al chef de la histriónica serie «South Park» en su versión original.

El joven bajista neoyorquino Marcus Miller trabajó con Miles Davis en la década de los 80. Músico total, también toca el teclado, el clarinete, el saxo y la guitarra. Músico prolífico, ha participado en más de 500 grabaciones, tanto como instrumentista como productor. El último, «Free» (Sony/BMG, 2007). A medianoche, será el turno de Van Der Graaf Generator, una banda mayúscula del más oscuro rock progresivo británico de los 70, dirigida por Peter Hammill. Separada desde finales de los 70, la formación de Manchester se reunificó en 2005 como trío compuesto por el guitarrista y vocalista Hammill, el teclista Hugh Banton y el batería Guy Evan. Aquí presentarán su reciente «Real Time», doble trabajo en directo, grabado en su reunificación de mayo del 2005.