La Policía autonómica volvió a protagonizar un nuevo acto represivo al cargar contra los cerca de mil quinientas personas que participaron ayer en la manifestación que denunció en Urbina el macroproyecto del Tren de Alta Velocidad, tal y como informaron a GARA varios de los manifestantes. Sin embargo, la marcha convocada por AHT Gelditu! Elkarlana finalizó con total normalidad en la plaza de la localidad alavesa, con un acto político en el que volvieron a dejar en evidencia el proceder «impositivo» de los gobernantes del Ejecutivo de Lakua, a expensas de la voluntad popular.

Alrededor de mil quinientas personas partieron sobre las 18.00 de ayer desde la plaza del municipio alavés de Urbina en manifestación, con objeto de denunciar el macroproyecto del Tren de Alta Velocidad y «exigir su inmediata paralización». Según relataron a GARA, cuando la marcha se dirigió hacía las obras del TAV en los alrededores de Urbina, tanto los guardas privados como los decenas de agentes de la Ertzaintza que custodian las obras -mencionaron que incluso había agentes de la Guardia Civil-, cerraron el paso a la marcha mediante un cordón policial. Después de permanecer cerca de un cuarto de hora ante los policías, los manifestantes optaron por dar media vuelta y retroceder a Urbina con objeto de llevar a cabo el acto político previsto allí.

Futuro incierto de la agricultura

Según informaron a este diario, fue en ese momento cuando la Ertzaintza procedió a efectuar una carga, «con pelotazos», cuyo resultado desembocó en, al menos, dos personas heridas.

No obstante, la manifestación prosiguió con normalidad hasta la plaza del municipio alavés, en el que volvieron a reunirse todos los manifestantes después de la carga policial. En Urbina, en cambio, no hubo presencia policial alguna.

Dos bertsolaris abrieron el acto que se celebró en el municipio alavés una vez finalizado la marcha. La secretaria general del sindicato agrario UAGA, Eva López de Arroyabe, fue la primera en subirse al atril y tomar la palabra para denunciar las devastadoras consecuencias que ya están teniendo los municipios afectados por el paso del TAV. En nombre de los agricultores, López de Arroyabe criticó que vistan con tintes de «beneficio social» un macroproyecto que aboca a la desaparición de una forma de vida como la agricultura en varios municipios.

Por su parte, Mila Elortza, en nombre de AHT Gelditu! Elkarlana denunció «la inminente expansión de las obras del TAV» que el Ministerio español de Fomento está a punto de emprender en la comarca de Arratzua-Ubarrondo. Además, criticó que el Gobierno de Lakua ahonde en «la imposición» por encima de la voluntad mayoritaria de la sociedad en contra del TAV.