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circuito de getxo Memorial Ricardo Otxoa

Reynés continúa con la racha del Caisse d'Epargne

Zaballa ganó la Euskal Bizikleta, Rodríguez en Zornotza y Ordizia, y el mallorquín remató la faena ayer

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Unai IRARAGORRI | GETXO

El Caisse d'Epargne se fue de vacío del pasado Tour, pero no ha perdido su olfato ganador. Ayer dominaron en Getxo y Vicente Reynés alzó los brazos en el muelle de Arriluze y, de paso, celebró que cumplía 26 años y logró la victoria número 25 del equipo. Como en años anteriores, el Circuito de Getxo-Memorial Ricardo Otxoa se resolvió al esprint y el mallorquín evitó una sorpresa monumental pues por milímetros superó al japonés Tahashi Miyazawa (Nippo), mientras que su compañero José Joaquín Rojas fue tercero y Xabat Otxotorena (Orbea), cuarto y mejor vasco. El día acompañó y los que no estaban en la playa de Ereaga abarrotaron el tradicional circuito de 16,8 kilómetros y la línea de meta.

El Caisse d'Epargne demostró que no depende sólo de Valverde y que está en racha en Euskal Herria. Zaballa ganó la Euskal Bizikleta, Rodríguez venció en Zornotza en abril y en Ordizia la pasada semana y Reynés remató ayer el excelente trabajo de sus compañeros de equipo. Un bloque joven y con gente experimentada y que, salvo en las clásicas del pavés, destaca. Por ejemplo, Karpets ha ganado las vueltas a Suiza y Catalunya y Gutiérrez el Tour del Mediterráneo. Hasta un total de diez corredores han ganado alguna carrera este año.

Las prepara a conciencia y los resultados llegan porque tiene rematadores. Zaballa, Plaza y Aitor Pérez se metieron en la escapada protagonista, junto a Galdos y Etxebarria (Euskaltel), Herrero y Lasa (Karpin), Mezo y Agirre (Orbea) o Amuriza (Mateos). La fuga con una ventaja máxima de 3.10.

El Relax quería ganar con Vicioso y echó abajo la escapada a falta de dos vueltas. El Caisse d'Epargne ya había conseguido su propósito, que otros harían el trabajo de caza, y no dejó que se les escapara la carrera. Moreno (Relax) lo intentó en el último giro pero fue en vano. Al igual que otros años el triunfo del Memorial Otxoa se resolvió al esprint. Reynés remató la faena e impidió la sorpresa de Miyazawa.

«Sin una afición como la vasca no habría ciclismo»

Una lesión en el coxis por una caída en el Tour de Flandes truncó el mejor momento de la temporada de Reynés y no pudo brillar en las clásicas del pavé, pero ha vuelto a recuperar su mejor golpe de pedal y ayer celebró por todo lo alto su 26º cumpleaños. «Ha sido una carrera muy nerviosa y el equipo ha controlado perfectamente. Soy bastante rápido, y en este momento me encuentro muy bien». De hecho, no está en la lista para correr la Vuelta pero ahora confía en ganarse un puesto. Por último, subrayó el ánimo de la afición vasca. «En el País Vasco siempre hay mucha afición y eso nos viene muy bien porque sin ellos ya no habría ciclismo». Este año ganó en Mallorca pero su victoria más importante la consiguió en una etapa de la París-Niza hace dos años.

Entre los vascos, destacó Otxotorena, regular como siempre y que quema sus últimos cartuchos de la temporada. Tenía esta carrera marcada con una equis porque el año pasado ya destaqué -fue quinto- y es muy propicia para mí, por eso lo hemos intentado y nos hemos quedado cerca. En su tercer año en el Orbea, ganó una etapa del Circuito Montañés y se mantiene «a la espera» de los huecos que puedan quedar en el Euskaltel- Euskadi.

U.I.

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