«Un año sin parar», además del título de la exposición que el colectivo Menosmegas presenta en la librería Zuloa, es la mejor forma de resumir el último año del grupo que conforman Nerea Lekuona, Soledad Calzada y Puy San Martín. Y es que estas artistas han realizado durante el último año tres grandes proyectos artísticos. Lo que se podrá visitar hasta el 20 de septiembre en la librería es, por tanto, una selección de todo ello. La galopante trayectoria de Menosmegas no ha pasado por alto en Gasteiz y por ello obtuvieron el segundo premio en el último Certamen de Arte Alavés.

El objetivo y, probablemente, la clave de su éxito es hacer un arte entendible y cercano según aclara Calzada: «Que la idea de ir a un sala de exposición forme parte del ocio». En este camino es donde entran los proyectos «Anónimo y desconocido», «Fruturama» y «Showvenir» que se podrán conocer en Zuloa, sitio conocido por albergar diversas exposiciones alternativas.

Cada iniciativa es diferente, pero todas tienen algo en común: huyen del arte inintelegible. «Queremos un acercamiento entre el que hace arte y el que lo disfruta», explica Calzada. Este objetivo se concreta también en los sitios que escogen para mostrar sus creaciones, que intenta ser lo más cercano posible.

«Un año sin parar» es, por tanto, una especie de mosaico de sus exposiciones que, por limitaciones de espacio, no se reproducirán de forma íntegra. El colectivo inició su trayectoria con «Anónimo y desconocido», exposición que estuvo en Montehermoso y donde se reivindicaba la profesionalidad del gremio. «Hoy en día cualquiera diseña un logotipo, una página web... y así, te encuentras cada cosa», exclama Nerea Lekuona.

La fruta como protagonista

«Fruturama» fue la segunda parada del colectivo. En esta ocasión la fruta, tan de moda, se convirtió en el objeto de trabajo. La última iniciativa, «Showvenir», representa la vivencia de seis hipotéticos visitantes de Gasteiz a través de seis series de tres fotos. La primera muestra el lugar de la ciudad que más le llamó la atención, otra retrata el souvenir ideal de este visitante y la tercera muestra este regalo dentro de su entorno doméstico habitual.

La exposición, una especie de anuario del colectivo, estará abierta al público durante dos meses. Cualquiera, sin necesidad de ser entendido, podrá visitarla en el número 21 de la calle Correría y ver con sus propios ojos una colección de creaciones que buscan integrar el arte en la vida cotidiana.