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«El podio en la Vuelta sería un sueño hecho realidad para el equipo»

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Samuel SÁNCHEZ

EUSKALTEL-EUSKADI

Samuel Sánchez es un ciclista en crecimiento, así lo certifica su trayectoria en la Vuelta: 15º en 2004, 11º en 2005, y una etapa y séptimo en 2006 más otra etapa. Así que en la edición que comienza el sábado en Vigo está más convencido que nunca de su asalto al podio de la ronda española. Incluso, ambicioso como siempre, quiere pelear por lo máximo posible, y por eso sueña con el maillot oro.

Unai IRARAGORRI |

El asturiano llega a Vigo con dos victorias Pro Tour, la crono de la Vuelta al País Vasco y la última etapa de la Volta a Catalunya. Desde julio ha preparado con mimo la Vuelta, el primero de sus objetivos de la segunda parte de 2007.

¿Qué preparación he llevado a cabo cara a la Vuelta? ¿Qué tal cree que llega a la salida de Vigo?

Pienso y quiero pensar que bien. El primero que tiene que estar convencido de la preparación y la planificación soy yo mismo. Y yo estoy contento porque he tenido una línea ascendente. Así que espero llegar a la Vuelta en el mejor estado de forma posible, y siempre dejando un poquito de margen para alcanzar la forma según pase la Vuelta, para acabar fuerte y tener un punto más cara al Mundial de Alemania que es otro de los objetivos.

De todas formas, no se podrá descuidar demasiado porque la dureza llega pronto.

Sí, sí, pero no creo que van a ser etapas decisivas .Por ejemplo, la etapa de Lagos de Covadonga sólo es el final, no hay más puertos. Hay que procurar perder el mínimo tiempo posible y salvar el día, y a partir de ahí centrarse en la crono de Zaragoza y en los Pirineos, que es donde se va a decidir la Vuelta a España.

¿Qué pruebas ha disputado como preparación?

Ordizia, Clásica de San Sebastián y Burgos. En esta última pienso que he estado en mi sitio, cada día un poco mejor, con control, sin pasarnos ningún día porque los esfuerzos se pagan y vamos poco a poco. El último día pude coger la fuga que llegó a meta, pero todavía no estaba a tope porque apenas pude disputar la etapa. Notaba que me faltaba un poco en las piernas. Esta última semana, he entrenado muy fuerte para poner las piernas a punto.

Así que se ha mojado...

No, porque estuve entrenando fuera, en el Levante, en la zona de Denia. Por lo menos no me mojé porque aquí en el norte el tiempo estuvo fatal.

¿Y en qué forma estima que llega a la salida?

Bastante bien, prácticamente parecido al año pasado. He procurado no llegar muy exprimido para tener margen de mejora porque no hay que olvidar que es una carrera de tres semanas y puede pasar todo; si llegas demasiado fino, al final lo puedes pagar, hay que mantener un equilibrio en esas tres semanas para poder estar lo más delante posible.

¿Qué objetivo se marca? ¿Sueña con el maillot oro?

¿El oro? Buff, se ve lejos.

El oro está muy caro siempre...

Muy caro, has dado en el blanco, porque son 21 días de competición y según pasan las etapas es cuando puedes hacerte mejor una idea de cuál puede ser tu sitio. A día de hoy estoy en las quinielas y es lo que cuenta, luego ya veremos.

Pero es ambicioso.

Sí, sí, por supuesto, yo no niego mi ambición. Mi mentalidad es ganadora y creo que hay que apostarlo todo porque si apuestas a décimo seguramente quedes más atrás. Por eso, hay que apostar a ganar para luego, por lo menos, estar en la pelea.

Una pregunta difícil: ¿Cambia una etapa por subir al podio?

(Se lo piensa). Ahora mismo, me haría mucha ilusión el podio más que una etapa, pero ganar es ganar ... Así que prefiero ir más allá, prefiero hacer podio y lograr una etapa. Me gustaría subir al podio porque ya tengo dos victorias de etapa en la Vuelta y me falto eso. Y darle un podio ahora mismo a este equipo sería un sueño hecho realidad para todos. Me quedaría más que satisfecho.

 
«El Tour quiero que me dé más, no que me quite lo que ya he conseguido»

A partir del sábado, Samuel se centrará en la Vuelta, pero no niega que tiene mucha ilusión y esperanza en el Mundial de Alemania.

¿Qué le parece el recorrido de la Vuelta? ¿Cuáles pueden ser las claves?

A mí me gusta ese formato: etapas cortas y nerviosas, emocionante. Además, los horarios son buenos porque no se sale hasta las doce y media o la una. Y el ciclista puede descansar. Me parece muy acertado. Las etapas decisivas son la crono de Zaragoza y las llegadas a Ordín y Cerler. Además, son tres etapas seguidas.

¿Qué rivales destacaría?

Mucha gente. Evans, Menchov, Karpets, Sastre, Marchante, Pereiro... Y uno que nadie dice, Santos González. Cunego también pienso que no viene a pasearse.

Al margen de la Vuelta, tendrá un ojo en el Mundial.

Sí, sí, no lo voy a negar. El Campeonato del mundo de Alemania me viene mucho mejor que el de Salzburgo del año pasado porque es más duro y más exigente. Pienso que puedo tener más opciones. Además, con Valverde y Freire en la selección puedo tener más libertad y puedo dar la sorpresa. Después correría París-Tours y Giro de Lombardía.

¿Se ha olvidado del Tour? ¿No se plantea disputarlo el próximo año?

El Tour siempre lo tengo en mente. Pero también me da miedo volver y fracasar, porque es una carrera que te lo da y te lo quita todo. Quiero que me dé más, no que me quite lo que ya he conseguido. Entonces me gustaría apostar a tope por él y luchar por buscar un puesto en la general y por etapas. Pienso que estoy cualificado. U.I.

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