Copa | El Glorioso accede a tercera ronda
El derroche albiazul encuentra premio y sacia a Mendizorrotza
El Alavés se adelantó con un gol de Wellington en el 33 y no pasó demasiados agobios pese a la expulsión del brasileño en el 46
Jon ORMAZABAL | GASTEIZ
La Copa, el torneo que mayores alegrías ha dado en los últimos años, fue el escenario en el que el Alavés encontró el primer premio de la temporada y, sobre todo, logró saciar el hambre de fútbol de un estadio de Mendizorrotza que ayer vio recompensadas sus ganas de aplaudir al equipo con un bonito, merecido e importante triunfo.
Sin el juego vistoso o de toque -pero carente de profundidad- del Nastic, el derroche de ilusión albiazul se impuso justamente en un choque en el que salvo el error de Wellington en su expulsión, hubo grandes motivos para la esperanza. Y es que, salvo algunas dudas en la creación, el Alavés se mostró como un bloque implicadísimo y fuerte, con un referente muy importante como David Aganzo en punta y que demostró muchos recursos para cuando juegue con el marcador a favor. Incluso con un jugador menos, el equipo gasteiztarra demostró hasta esos recursos tácticos para aguantar que tanto se han echado de menos en los últimos años.
Con dos equipos muy diferentes a los empleados en el debut liguero, el comienzo del partido tuvo similitudes con el del Nou Estadi, con una jugada a balón parado en un corner en la que el central Tortolero mandó el balón por encima del larguero a puerta vacía. Por lo demás, el juego de toque del equipo catalán, con cierto peligro a la hora de mover el balón por parte de los centrales, se impuso a la voluntad albiazul en la primera media hora, en la que un posible penalti por agarrón de Medina a Aganzo -al que el árbitro de ayer también parecía tener atravesado- fue la mejor opción.
Precisamente una acción de calidad del delantero, abriendo el balón a banda derecha para Miguel Pérez, generó el tanto que desniveló la balanza. El extremo madrileño puso un buen centro desde banda derecha y Wellington logró el primer tanto oficial de la temporada, haciendo inútil la estirada de Juanmi, que llegó a tocar el balón. El tanto asentó a los albiazules, que se zafaron del agobio al que se había visto sometidos hasta entonces y guardaron la ventaja hasta el descanso con mucha más comodidad.
Los problemas regresaron, sin embargo, nada más reanudarse el juego, cuando Wellington volvió a confundir intensidad con violencia y fue expulsado por soltar un manotazo a Tortolero después de recibir una falta.
Tras dos buenas aproximaciones gerundenses con Miku como protagonista y la apuesta ofensiva de Javi López con la entrada de Jandro, Josu Uribe reconstruyó su equipo con el claro y firme propósito de defender su mínima ventaja. Astudillo y Casar entraron al césped en sustitución de Miguel Pérez y un desdibujado Sergio Rodríguez, con lo que Coromina pasó al lateral, adelantado a Calderón.
El asedio grana volvió a crecer en intensidad con buenas opciones para Miku, que envió el balón al palo, y Jandro, que obligó a lucirse a Ardouin, pero sobre todo desde la entrada de Gabri al campo, el equipo gasteiztarra tuvo también sus buenas opciones para sentenciar, especialmente de la mano de David Aganzo, que obligó a Juanmi a lucirse hasta en tres ocasiones.