La cita será el próximo 7 de octubre, domingo, a las 10.30 de la mañana en el Guggenheim Bilbao y se prevé que sea todo un éxito. Las 15.600 personas que forman parte del colectivo Amigos del Museo empezaron ayer a recibir la carta de invitación para tomar parte en la acción artística ideada por Maider López y, sólo en la primera hora se recibieron un centenar de llamadas mostrando su disposición.

En un encuentro mantenido con los medios de comunicación, Maider López (Donostia, 1975) explicó que la acción consistirá en «crear arquitectura a partir de las personas». Serán dos creaciones artísticas, según adelantó. En la primera de ellas, cada «amigo» sujetará una plancha de un material semejante al titanio sobre sí mismo, de tal forma que el conjunto creará una nueva galería en el Museo, a la manera de los mosaicos que se forman en los campos de fútbol. En la segunda acción, las distintas placas formarán una pared que dará continuidad al edificio de Gehry creando un muro fugaz que aparecerá y desaparecerá al moverse la gente.

«Generaremos estructuras nuevas de titanio, como si los límites del museo se hubieran expandido», dijo López, quien insistió en que «será el colectivo de Amigos el que construya la arquitectura, una arquitectura efímera creada a partir de las personas. Lo importante de este trabajo es que la participación es lo que genera el trabajo». De la misma forma, pidió que no se busquen imágenes espectaculares. «No es un evento para ser visto, no es un espectáculo, es un evento para ser vivido».

Se realizarán fotografías aéreas de la acción y cada participante recibirá una imagen seriada de la misma firmada por la artista. Maider López cree que 300 personas sería un buen número para desarrollar la acción, aunque podrán tomar parte todos los que deseen hasta un máximo de 1.000. Éste es el proyecto participativo más complejo de los realizados hasta ahora por la artista guipuzcoana. En 2005 llevó a cabo «Ataskoa», en la que cientos de automovilistas fueron convocados a crear un monumental atasco multicolor en Nafarroa; en 2006, repartió toallas rojas en una concurrida playa de Gipuzkoa. «En esas ocasiones, la gente no tenía que hacer gran cosa. Esta vez la participación es mucho más activa. No habrá ensayo previo, pero estaremos media hora realizando alzadas de las placas hasta conseguir el efecto deseado para la fotografía aérea. Después, con menos gente, llevaremos a cabo la segunda acción. Calculo que acabaremos sobre las dos del mediodía», indicó.

Ligada al museo

Convertida en una de las figuras más prominentes del arte vasco contemporáneo, la obra de Maider López surge del diálogo entre arte, arquitectura y diseño. Su actividad ha estado ligada al Museo Guggenheim Bilbao desde su inauguración en 1997, colaborando en diferentes proyectos, como la iniciativa educativa «Aprendiendo a través del arte».

La artista, galardonada este año con el premio ABC de Pintura y Fotografía, es una de las doce creadoras seleccionadas por el Guggenheim para participar en la muestra «Cada uno a su gusto», que se inaugurará el próximo 16 de octubre.