El zaguero de Leitza Rubén Astibia disputará hoy su último partido como remontista profesional en el encuentro que abrirá la función de Galarreta. Astibia formará por última vez con Zalakain para enfrentarse a Larrea y Gaztelu a partir de las 16.00, por lo que la atención de la jornada estará, por una vez, en el primer partido del festival. Astibia dirá, de ese modo, adiós al remonte de primer nivel tras debutar como pelotari profesional hace siete años.

El zaguero de Leitza ha decidido abandonar la actividad para dedicarse de lleno a su otro trabajo, como mecánico en un taller de Lekunberri. «Veo estos años como una buena experiencia, he podido dedicarme profesionalmente al deporte y me he sentido muy a gusto. Me guardo recuerdos muy buenos, a excepción del año que estuve lesionado por una rotura de ligamentos en la rodilla derecha, un año después de debutar», comenta el pelotari navarro.

El zaguero de Leitza no olvida sus comienzos en la modalidad y se podría decir que los recuerda con cariño. «Siempre me ha gustado el deporte, la mano, el fútbol... sucedió que tenía una cesta vieja colgando en la pared, en casa, y me dio por dar unos pelotazos. Aquello me gustó, me compré una cesta nueva y practiqué más. Al principio cuesta mucho el mero hecho de encestar, la pelota se te va hacia atrás, pero hay que volverlo a intentar, te fijas en cómo lo hacen los demás, y poco a poco mejoras. Después fui a Galarreta, hablé con Etxabe -remontista profesional- y practicaba ahí los fines de semana. Con el tiempo, y después de meter muchas horas, llegó el debut, algo de lo que me siento orgulloso porque no todo el mundo lo consigue», afirma el remontista de Leitza.

La elegancia de Eizagirre

Después de jugar durante siete temporadas y de ver infinidad de partidos, Astibia se queda con la elegancia de Jon Eizagirre, «un remontista que llama la atención por sus posturas, son excelentes», y, sobre todo, con Koteto Ezkurra, que «tiene un mérito tremendo, la cantidad de años que lleva jugando ya, 17, y con un nivel increíble, siempre concediendo ventajas a sus rivales», señala Rubén Astibia.

El hijo del aizkolari Patxi Astibia piensa continuar ligado al deporte de algún modo. «Algo seguro que hago, andar en mountain bike, jugar a mano con una pelota goxua con los amigos, o a paleta goma... lo que tendré más difícil es jugar a remonte. Me da un poco de pena, pero es lo que hay. Se puede vivir del remonte, pero muchos lo tenemos que compaginar con otras cosas y a mis 31 años veía que tampoco estaba para echar cohetes», admite el pelotari.

El festival de su adiós se completará con el estelar entre Zeberio II-Olazar y Altuna II-Etxeberria III, un nuevo reto para el txapeldun Patxi Zeberio después del apabullante triunfo del pasado jueves en su regreso a las canchas tras la final del Torneo Casino Kursaal. Tal y como está Zeberio II, se le ve capaz de sacar adelante cualquier partido, por comprometido que parezca. El resto de partidos es el siguiente: Urriza-Iriarte contra Agirresarobe-Ángel Lekunberri y Matxin IV-Auzmendi contra Bereziartua-Urko.