Actos festivos y debate político sobre el Privilegio de la Unión
Iruñea revivió ayer el llamado Privilegio de la Unión de 1432 -acuerdos entre los tres burgos hasta entonces enfrentados que en la práctica unificó la ciudad-. Por primera vez, el Consistorio de UPN intentó dar un tono más festivo y popular a una jornada hasta ahora sólo institucional y religiosa. Nafarroa Bai saludó esta circunstancia, y ANV, por su parte, aseguró que aquel acontecimiento histórico encierra lecciones importantes válidas también para el presente.
R.S. |
Muchos vecinos de Iruñea no conocían hasta ayer mismo qué fue el Privilegio de la Unión. Pese a que el Ayuntamiento tradicionalmente ha recordado el día con un oficio religioso, esta vez decidió organizar en el centro de la ciudad algunas actividades festivas que han provocado que el hecho se divulgue, y que en torno a él surja incluso un cierto debate político.
Así, en la confluencia entre los burgos o barrios que alcanzaron el acuerdo que unificó la ciudad hace 584 años (Nabarreria, San Nicolás y San Cernin) se llevó a cabo un mercado medieval con puestos de alimentación o artesanía. Hubo también actividades de teatro y conciertos. Los responsables del Ayuntamiento, en cualquier caso, tampoco dejaron de lado la celebración típica: una misa en la ca- tedral en la que Yolanda Barcina, alcaldesa de UPN, homenajeó al rey Carlos III, llamado El Noble e impulsor de aquellos acuerdos que acabaron con el hasta entonces fraccionamiento violento de Iruñea.
El intento de popularización de la fecha ha hecho aflorar un debate entre los partidos que tiene incluso un trasfondo político. Mientras desde el Ayuntamiento se limitan a exponer la importancia de aquella fusión y a exaltar las connotaciones históricas y religiosas, Nafarroa Bai resalta los «valores cívicos» que se desprenden de ella y ANV encuentra lecciones políticas para el presente.
NaBai apunta en una nota que la unión de los tres burgos hasta entonces enfrentados «evoca los valores de la convivencia cooperativa entre vecinos de orígenes, culturas y lenguas diferentes, de innegable vigencia en nuestros días». Y saluda que el Ayuntamiento haya promovido una celebración de carácter ciudadano «con el fondo y la forma que habíamos solicitado».
ANV, por su parte, entiende que «la principal conclusión de aquel hecho histórico es que los enfrentamientos, disputas y conflictos entre diferentes que viven en una misma comunidad se resuelven de manera definitiva y justa si se realiza un análisis de la realidad desde su raíz y se utilizan el diálogo, el acuerdo y la negociación». La formación ekintzale recalca que la del 8 de setiembre de 1423 es «una lección histórica que conviene aprender». Y propone llenar los escenarios del acuerdo de contenido didáctico «para dar a conocer nuestra historia».
Se felicitó por que el Ayuntamiento de UPN haya organizado esta vez una celebración «con el fondo y la forma que habíamos solicitado» para una jornada que «evoca valores cívicos y de convivencia».
Cita el acuerdo de 1432 como un ejemplo de resolución de conflictos y propone recordarlo con un itinerario que una Plaza Consistorial y Palacio Real, «sedes del poder de la ciudad unificada y el reino de un país independiente».