Los palestinos demandan seguridad en el aniversario de la masacre de Sabra y Chatila
GARA |
Centenares de palestinos y libaneses conmemoraron ayer las masacres perpetradas hace 25 años en los campos de refugiados de Sabra y Chatila, al sur de Beirut. Supervivientes y descendientes de palestinos y libaneses muertos en estas masacres, llevadas a cabo por milicias cristianas de derecha con el apoyo del Ejército israelí, portaron fotos de las víctimas y pancartas con lemas como «Juzgad a los criminales», «No nos dejaremos masacrar una segunda vez» o «No olvidaremos jamás».
El representante del movimiento Hamas en Líbano, Osama Hamdane, reclamó «protección política que garantice a los refugiados palestinos en Líbano sus derechos y su seguridad». El 16 de setiembre de 1982 por la noche, milicias aliadas de Israel entraron en Sabra y Chatila para «vengar» la muerte del presidente Béchir Gemayel. Entre 800 y 2.000 civiles murieron en tres días ante la pasividad del Ejército israelí, que había invadido Líbano dos meses antes.
Coincidiendo con este aniversario, soldados del Ejército israelí mataron a un palestino del campo de refugiados de Balata, al este de la ciudad cisjordana de Naplusa.