Tras más de un año de trabajo y después de que UPN perdiera la mayoría absoluta, la plataforma Hilarria consiguió ayer uno de sus objetivos: un acuerdo municipal en favor de la reinstalación de la estela en recuerdo a Germán Rodríguez, fallecido por disparos policiales en los Sanfermines de 1978. PSN, NaBai y ANV unieron por fin sus votos (catorce) y superaron a los de UPN (trece). Habrá que ver ahora si el Ayuntamiento ejecuta el acuerdo, saca la estela del almacén en el que la guardó supuestamente cuando emprendió las obras del parking de la Avenida de Roncesvalles, y lo vuelve a colocar. ANV le instó expresamente a «cumplirlo».

UPN, como estaba cantado, votó en contra, pero trató de esquivar la discusión política de fondo con argumentos de tipo técnico. Juan Luis Sánchez de Muniain alegó que bastaría con poner una placa y añadió que reinstalar la estela levantada en 1978 por iniciativa popular supone «dar carta de naturaleza a algo que ha sido colocado por un grupo de personas y sobre lo que el Ayuntamiento no tiene responsabilidad alguna».

El portavoz de UPN sólo aparcó este tono en la parte final de su intervención, cuando afirmó que desde aquel año ha habido «41 víctimas» (en referencia supuesta a atentados de ETA) y dejó caer que «la estela divide a los pamploneses». Esta afirmación indignó a ANV: Mariné Pueyo le retó a explicar quién puede sentirse en contra de que se recuerde una situación que ha quedado muy grabada en el subconsciente de todos los vecinos de Iruñea.

PSN: «Operación de castigo»

Desde el resto de partidos se recordó a UPN que en casi 30 años ningún gobierno municipal, ni siquiera los anteriores alcaldes de este partido, habían actuado contra la estela. Para PSN, NaBai y ANV, resulta necesario que lo ocurrido en los Sanfermines de 1978 no se olvide. Javier Torrens, portavoz del PSOE, argumentó que aquella fue «una inusitada operación de castigo con trágicas consecuencias». Y Txema Mauleón, de Nafarroa Bai, añadió que «merece un recuerdo expreso».

Todos los intentos de aprobar esta moción al final de la pasada legislatura habían sido bal- díos por la mayoría absoluta de la derecha. En un momento dado, CDN pareció dispuesto a alinearse con la oposición, pero al final faltó un voto. El concejal del PSN Jorge Mori reveló ayer algo sobre aquel episodio frustrado. Dijo que sus ediles «recibieron orden de votar que sí , pero a alguno le sentó tan mal que hasta se puso enfermo».