Los pueblos afectados por el macrovertedero de Erreniega llevan sus quejas al Gobierno
Una representación de los pueblos afectados por el proyecto de macrovertedero de Erreniega ha transmitido directamente al director general de Medio Ambiente y Aguas sus demandas y preocupaciones.
GARA |
La asamblea de los pueblos afectados por el futuro macrovertedero de Erreniega considera «inviable» este proyecto, teniendo en cuenta las numerosas afecciones y perjuicios que una instalación de estas características tendría para los vecinos.
Éste es el mensaje que una representación de estos pueblos de la Cendea de Zizur transmitió anteayer al director general de Medio Ambiente y Aguas, Andrés Eciolaza, que estuvo acompañado por el jefe del Servicio de Calidad Medioambiental.
La que sería la mayor escombrera de Iruñerria está impulsada por la Asociación de Constructores y la empresa Ream, al parecer para llevar allí los escombros de las obras derivadas del TAV y de la nueva ciudad de Gendulain.
En un primer momento fueron los pueblos de la Cendea de Zizur quienes mostraron su total oposición a este proyecto. Posteriormente, a la vista de tres informes contrarios, fue el propio Ayuntamiento quien lo denunció y se ofreció a buscar un nuevo emplazamiento.
En la reunión mantenida anteayer entre una representación de los pueblos afectados y otra del Departamento de Medio Ambiente, los vecinos reiteraron su rechazo a que este vertedero abarque la zona norte de Erreniega, al tiempo que calificaron de «despropósito» la pretensión de que sea utilizado por un periodo de 30 años, así como su «excesiva» capacidad.
600 camiones por día
Los vecinos también expusieron a los representantes de Medio Ambiente que el proyecto supone una «vulneración» de los valores de la Estrategia y Modelo de Ocupación del Territorio (EMOT), teniendo en cuenta que la zona está proyectada como suelo de preservación por «su valor natural y de prevención de riesgos por las especiales condiciones geológicas».
Otro motivo de rechazo al macrovertedero es la gran afección al tráfico de la zona, ya que en épocas de baja intensidad transitarían unos 600 camiones al día por los núcleos urbanos, principalmente por Astrain.
Por último, los vecinos mostraron su preocupación por el hecho de que no se tenga en cuenta el margen de mil metros a las poblaciones más cercanas, y solicitaron que se realicen estudios geológicos más extensos.