Gudari eguna 2007
Miles de personas reclaman libertad en el Gudari Eguna
Como todos los años, miles de personas salieron a la calle en los pueblos y barrios vascos a fin de recordar a los militantes muertos en la lucha por los derechos de Euskal Herria y llamar a seguir su estela en favor de un escenario democrático para este país. Movilizaciones que en algunos casos estuvieron obstaculizadas por las fuerzas policiales, aunque éstas no impidieron que las figuras de «Txiki», Otaegi y cientos de luchadores más fuera recordada.
Iker BIZKARGUENAGA | GASTEIZ
El 27 de setiembre es un día marcado en rojo en Euskal Herria desde que hace 32 años el régimen franquista fusilara a los militantes de ETA Jon Paredes Manot, Txiki, y Anjel Otaegi, junto a otros tres militantes antifascistas del FRAP. Una fecha para recordar a los fallecidos en la lucha por los derechos de este país y llamar a seguir el camino marcado durante décadas de compromiso.
Ayer, como todos los años, fueron miles las personas que salieron a la calle por este motivo en los pueblos y barrios de Euskal Herria. Así, en Bilbo fueron 700 las personas que se movilizaron por la tarde, y otras 600 hicieron lo mismo en Iruñea, con fuerte presencia de la Policía española, que hizo amago de cargar, aunque finalmente el acto político pudo desarrollarse sin problemas.
También hubo manifestaciones en Donostia (500), Zarautz (200), Usurbil (60), Azpeitia (150), Lezama (70), Derio (30), Loiu (20), Leioa (85), Errenteria (500), Andoain (50), Sudupe (50), Bergara (40), Eibar (120), Urretxu-Zumarraga (20), Etxarri-Aranatz (130), Urruña (40), Beasain (120), Mutriku (70), Arrasate (400), Laudio (120), Bermeo (50) y Tafalla (35).
En algunas localidades, además de las movilizaciones vespertinas, también hubo paros en los centros de enseñanza, como fue el caso de Leitza, donde los alumnos pararon dos horas y se reunieron 100 personas, mientras que por la tarde se juntaron otras 85. En Markina-Xemein 90 se movilizaron por la mañana y otras 60 por la tarde. También hubo paros y movilizaciones, entre otros centros educativos, en la UPNA (40), en el campus de la UPV de Leioa (100), el campus de Gasteiz (50), Deba (50) y Elgoibar (100), a convocatoria de Segi.
Identificaciones y cargas
Aunque la mayoría de las movilizaciones se pudieron desarrollar sin mayores problemas -aunque con presencia policial-, la Ertzaintza obstaculizó varias de ellas, llegando a cargar y a identificar a los participantes en algunos casos.
Fue el caso de Gernika, donde alegando que se trataba de una convocatoria ilegal los policías cargaron con porras contra las personas que pretendían manifestarse, e incluso retuvieron en una furgoneta a un edil de ANV, a quien identificaron. A pesar de ello, 100 personas hicieron en la plaza del mercado un acto de homenaje y una ofrenda floral.
En Hernani, 300 personas se movilizaron a pesar de que la Policía autonómica también cargó, mientras que en Zornotza, donde se manifestaron 75 personas, fueron identificados dos vecinos. En Tolosa, por la mañana hubo paros en los centros escolares, y cuando se iba a celebrar un acto político en la ikastola Laskurain, varios ertzainas hicieron acto de presencia e identificaron mediante grabación en vídeo a cinco jóvenes.
Mientras tanto, en Amurrio fue el propio alcalde quien envió a la Policía Municipal a retirar un pebetero con las fotos de Txiki y Otaegi y de un refugiado político de la localidad.
La Ertzaintza y la Policía española no fueron los únicos cuerpos policiales en hacer acto de presencia, ya que en Lizarra la Gurdia Civil, por orden del juez de la Audiencia Nacional española Fernando Andreu, impidió la manifestación que había sido convocada por la tarde.
«O la opresión, o la lucha»
Una de las movilizaciones más importantes fue la de Gasteiz, donde unas 800 personas participaron en una manifestación encabezada por una enorme ikurriña. A la altura de la calle Francia se recordó a José Mari Igerategi, Ijitu, fallecido en aquel mismo lugar al explotar el artefacto que portaba.
Un dantzari bailó un aurresku en su honor antes de proseguir la marcha hasta la plaza de los Fueros. Allí se celebró un acto político en el que se recordó a los militantes alaveses fallecidos y se proyectó un vídeo evocando lo que han sido todas estas décadas de lucha.
Asimismo, se recordó que Euskal Herria «hoy, al igual que hace treinta años, es un pueblo oprimido» al que «se le niega su propia existencia». «Desarrollar cualquier proyecto acorde a los deseos y necesidades de los ciudadanos y ciudadanas vascas está prohibido», se denunció, al tiempo que se destacaba que «hemos sido condenados a elegir continuamente entre admitir esta opresión o luchar por la libertad». Una tesitura ante la que se señaló, sin duda, que «los gudaris son ejemplo de libertad y de lucha para miles de abertzales y demócratas en la lucha en favor de Euskal Herria».
Tras indicar que «es la lucha la que nos ha traído hasta aquí», hasta «crear una nueva oportunidad para la libertad de Euskal Herria», se recordó la propuesta de la izquierda abertzale por un marco democrático, «a la que, una vez más, le han dicho que no». «Y con la apuesta por el no, los estados ha apostado al mismo tiempo por la represión, la negación y por evitar el debate democrático», agregaron.
Tras hacer un llamamiento a seguir luchando y trabajando por Euskal Herria, el «Eusko Gudariak» puso fin al acto.
Segi también hizo ayer un llamamiento a la lucha, «porque merece, ya que tenemos la libertad de nuestro pueblo cada vez más cerca».
Ayer se produjeron varios actos de sabotaje en Euskal Herria. En la línea de Renfe en Errenteria desconocidos cortaron la catenaria, impidiendo el tráfico durante horas. En Hernani, la sede del PSE fue rociada con líquido inflamable.
En el contexto del Gudari Eguna, Ahaztuak ha querido expresar una vez más su compromiso con la memoria antifascista y recordar a todas las víctimas de la dictadura franquista. Los cementerios de Zarautz, Derio y el de Santa Isabel, en Gasteiz, fueron escenario de sendos actos en los que los representantes de esta asociación reivindicaron «la memoria, la resistencia y la lucha de todos los gudaris de diferentes épocas».
«Debemos socializar que no hubo ruptura democrática con la dictadura asesina impuesta durante 40 años, sino que los poderes fácticos y las elites políticas del estado terrorista gestionaron una reforma formal a fin de mantener sus intereses y su cuota de poder», declaró Lander García en el acto celebrado al atardecer en la capital alavesa.
Decenas de personas acudieron al homenaje, en el que también participaron representantes de la Asociación de Víctimas del 3 de Marzo. En su nombre, José Luis Martínez Ocio valoró que «al recordar y homenajear a los gudaris caídos en la lucha» resultaba obligado citar a los cinco obreros muertos por la Policía española en 1976. «Estos compañeros, al igual que toda la clase trabajadora de Euskal Herria, lucharon no sólo por conseguir unas condiciones más justas y dignas de trabajo, sino también para recuperar las libertades que nos habían sido arrebatadas tras el golpe militar franquista por la fuerza de las armas», subrayó, recordando seguidamente que «31 años después de la masacre de Gasteiz, seguimos exigiendo justicia para los trabajadores asesinados y castigo para los responsables de aquella acción terrorista dirigida del Estado».
García trajo a la memoria que «decenas de miles de personas fueron asesinadas por defender la libertad y la democracia frente al fascismo», entre ellos «más de 350 alaveses exterminados por el terror franquista».
Muchos de ellos fallecieron en la tapia del cementerio de Santa Isabel, lugar en el que se desarrolló el acto. Entre ellos, el poeta y comandante de Euzko Gudarostea Estepan Urkiaga, Lauaxeta, el consejero de Sanidad del Gobierno Vasco Alfredo Espinosa y el dirigente de ANV y gestor de la Diputación de Araba José Placer. «Las ejecuciones se sucedieron por miles durante los primeros años del régimen y continuaron hasta los últimos días de vida de Franco», apuntó García, para recordar también que ayer hizo 32 años que los mismos fascistas fusilaron a «Txiki», Otaegi y tres militantes del FRAP.
«Nunca ha habido ruptura con el franquismo, porque ellos fueron los que dirigieron, tutelaron y controlaron el supuesto cambio, con una ley de punto y final al servicio de los criminales fascistas», denunció.
Además de las movilizaciones celebradas ayer, en los próximos días también hay convocatorias para recordar a los militantes fallecidos. Así, el próximo domingo se celebrarán sendos actos de homenaje en los montes Sollube e Irimo.
