Batasuna imputa las muertes de Langraitz y Basauri a «la violencia del PSOE»
Batasuna ha denunciado la reciente muerte de dos presos en las cárceles de Langraitz y Basauri, y ha añadido que ambas muertes «no ocurren por casualidad, sino que son consecuencia de la política penitenciaria que impone por la fuerza el Estado español».
GARA |
Batasuna ha responsabilizado directamente a la política penitenciaria en vigor en el Estado español de la muerte de dos presos en Basauri y Langraitz y ha recordado que son cuatro los presos muertos durante 2007. En este sentido, Batasuna exige poner fin a la actual política penitenciaria, así como «a los espacios de impunidad», además que reclama el respeto a los derechos de los presos.
En una nota de prensa, esta formación política valora que la política penitenciaria «tiene como único objetivo destruir al preso y, por lo tanto, no garantiza el respeto a sus derechos. Es más -añade la nota-, esta política penitenciaria condena a los presos a la muerte. El Estado español utiliza toda su violencia contra los presos».
Para Batasuna, el Estado español «marca cuál debe ser la política a aplicar a los presos, una política destructiva, basada en el castigo y la venganza y en la que los derechos son pisados y conculcados; la dispersión, la incomunicación, el aislamiento, las torturas, los malos tratos, la falta de atención médica se aplican a diario y son las características de esa política».
Lejos de «marcar diferencias» respecto de la política penitenciaria que desarrolló el PP, Batasuna considera que el PSOE «la ha endurecido y la vuelto más inhumana. En este sentido, criticamos asimismo la línea de colaboración que el PNV mantiene con esta política penitenciaria, ya que el PNV no hace nada por garantizar los derechos de los presos. La pasividad del consejero Azkarraga muestra a las claras la importancia de este tema en las agendas de los políticos».
Queda claro, a juicio de Batasuna, que «es imposible cambiar de raíz esta forma de abordar la política penitenciaria, desde el momento que el actual marco lo impone la Constitución española y queda a la vista la falta de capacidad del Estatuto. Por ello es necesario un marco democrático nuevo, en el que se respeten los derechos de los presos».
Batasuna exige respetar esos derechos y acabar «con esta política penitenciaria y con los espacios de impunidad».
Batasuna valora que la política penitenciaria del Estado español «tiene como único objetivo destruir al preso» y considera necesario «un marco democrático nuevo» en el que se respeten los derechos.