Juan Kruz Aldasoro compareció ayer ante el juez al ser imputado, junto a Koldo Barandalla, por los incidentes ocurridos el primer día de fiestas de Etxarri- Aranatz, el pasado mes de agosto. A los dos les imputan «desórdenes públicos» y «lesiones» a un agente. Barandalla fue además detenido el pasado 20 de septiembre, sin existir siquiera orden de arresto en el juzgado como se pudo comprobar después. Tras declarar quedó libre, como ocurrió ayer con Aldasoro.

El mahaikide no estuvo solo. Vecinos de Etxarri-Aranatz realizaron una concentración ante la Audiencia de Iruñea para denunciar «la brutal carga policial contra vecinos de la localidad el primer día de fiestas» y mostraron las fotografías que acreditaban las heridas sufridas por muchos de ellos y que fueron cau- sadas por la carga.

En las declaraciones realizadas antes de entrar a comparecer ante el juez, Aldasoro denunció la actuación del dele- gado del Gobierno español en Nafarroa, Vicente Ripa, ya que «fue él quien dio la orden de prohibir un acto pacífico y totalmente legal, tal y como manifestó el juez después de los hechos». Por ello, explicó que «la actuación de Ripa se debe a que quiere castigar al pueblo de Etxarri-Aranatz, por ser mayoritariamente de izquierdas y abertzale y porque homenajea con orgullo a los vecinos del pueblo que han luchado o luchan por la libertad de Euskal Herria».

Aldasoro recordó que «Etxarri-Aranatz es una pequeña población de tan sólo 2.500 habitantes, pero que ha tenido que sufrir la crudeza de las consecuencias del conflicto de Euskal Herria: Hoy en día tiene nada menos que siete vecinos encarcelados, dos de ellos han sido detenidos este mismo verano, y otro más, Bautista Barandalla, se encuentra preso a pesar de hallarse gravemente enfermo, y por tanto, debería estar en la calle». También recordó que «dos vecinos son exiliados políticos, y otros dos han muerto luchando por Euskal Herria». Es por ello que, según explicó el representante abertzale, esta población de Sakana celebra desde hace más de 30 años un día dedicado al recuerdo de los represaliados, y lo hace de forma pacífica, según resaltó.

En este 2007, por primera vez, Vicente Ripa decidió prohibir la manifestación que pretendía recorrer las calles de Etxarri-Aranatz el primer día de fiestas, el 6 de agosto, y lo hizo aún sabiendo que «la prohibición no se podía dar legalmente», según Juan Kruz Aldasoro. «Envió a los agentes de la Guardia Civil, y la brutal carga policial estuvo a punto de dinamitar las fiestas, ya que más de alrededor de veinte personas sufrieron lesiones a manos de los agentes». Una de ellas «lleva más de dos meses de baja», explicó el compareciente.

También denunció que «el colmo de los colmos es que los que en su día fuimos apaleados somos ahora los que tenemos que comparecer ante el juez», y añadió que «en una situación de justicia, de Estado de Derecho y de democracia, no estaríamos nosotros aquí, sino que estaría el mismo Ripa para explicar por qué prohibió una movilización que posteriormente la Audiencia de Iruñea declaró legal, o al responsable de la Guardia Civil para que explique por qué ordenó cargar contra los vecinos de Etxarri-Aranatz».

«Lo de Etxarri es un ejemplo»

En opinión de Aldasoro, «no pueden aceptar que esta localidad es de izquierdas y abertzale, y tampoco aceptan que su población homenajee con orgullo a sus vecinos que luchan por Euskal Herria». En la valoración que ofreció ayer, Aldasoro señaló que «lo ocurrido en Etxarri-Aranatz es el ejemplo de la estrategia de guerra que se está llevando a cabo en toda Euskal Herria», y a tal efecto indicó que «es el camino elegido por el PSOE, ya que no tiene el valor necesario para resolver el conflicto en el Parlamento». Por ello, emplazó a Nafarroa Bai e Izquierda Unida «a que reflexionen acerca de su adhesión a esa vía política, totalmente falta de democracia».

Desde Askatasuna, cuyos miembros también estuvieron presentes en la concentración ante la Audiencia de Iruñea, denunciaron que «numerosas manifestaciones están siendo prohibidas durante estas semanas en Euskal Herria, tal y como lo hemos podido comprobar el pasado fin semana».