Sysmo anuncia el cierre de su planta de Arazuri mientras VW reanuda la producción
GARA |
Sysmo, proveedor de Seat y de Volkswagen, presentará un concurso de acreedores (antigua suspensión de pagos) y cerrará su fábrica de Arazuri, además de la de Abrera (Barcelona), después de que el grupo alemán haya rescindido su contrato con este suministrador. La decisión se concretará con la presentación de un Expediente de Regulación de Empleo, que afecta a 120 personas en cada fábrica. Tanto Seat como VW Navarra han desviado los pedidos a otros proveedores.
Mientras Sysmo anunciaba su cierre, la factoría de Volkswagen, cuya actividad ha estado paralizada durante una semana a causa de la huelga indefinida convocada en Sysmo, reinició ayer la producción con sus líneas al 75% de capacidad.
El pasado día 1 los trabajadores de Sysmo iniciaron una huelga indefinida en defensa de sus puestos de trabajo, tras la incertidumbre creada por la instalación, frente a la planta de Sysmo, de una nueva factoría, HBPO, con capacidad para suministrar los frontales del Polo.
Aumentará el suminstro
Volkswagen Navarra achacó esta circunstancia a un previsible aumento de producción de este modelo, lo que a su juicio precisaría de un segundo fabricante, pero el pasado día 5 la multinacional comunicó la cancelación de la relación comercial con Sysmo. La llegada de piezas tanto de las fábricas europeas que también producen el Polo, como de la firma HBPO, posibilitaron ayer la reanudación de la producción en la fábrica de Landaben. Aunque la empresa había asegurado que HBPO no suministraría el cien por cien de los frontales del Polo, ayer matizó que «en la medida en que vaya incrementando su capacidad» esta empresa, se podrán poner la líneas de producción al cien por cien de capacidad.
El consejero portavoz del Gobierno navarro, Alberto Catalán, dijo confiar en que la empresa y la plantilla de Sysmo lleguen a una solución, por lo que adelantó el «respeto» del Ejecutivo a lo que las partes decidan. Por otro lado, un vigilante de seguridad resultó herido leve en un ataque con botellas incendiarias contra HBPO, que sufrió además daños materiales en la puerta principal y en unos palés.
A este respecto, Catalán afirmó que la violencia es algo a lo que «en ningún caso se debe recurrir», si bien precisó que no atribuía los citados hechos «al haber de los trabajadores porque hay colectivos que aprovechan conflictos laborales para otras cuestiones». El responsable de comunicación de VW Navarra lamentó lo sucedido y, sobre todo, que un vigilante de seguridad haya resultado herido. LAB indicó que el incidente debe ser una llamada a la reflexión para todos los agentes implicados en el conflicto porque «demuestra la incapacidad de los agentes económicos e institucionales para dar una salida racional al conflicto».
El sindicato abertzale subrayó que la preocupación y el objetivo «que debe centrar todos los esfuerzos sigue siendo la garantía del empleo y de las condiciones de trabajo». Añadió que, tras la rescisión del contrato de Volkswagen con Sysmo «queda más al descubierto que es responsabilidad de Volkswagen dar salida a la situación». ELA, CCOO y UGT condenaron el ataque.