El parón producido por los partidos internacionales deja al Athletic sin posibilidad de reaccionar inmediatamente tras el traspiés sufrido en San Mamés ante el Almería. El descanso liguero otorga a los rojiblancos la posibilidad de intensificar el trabajo realizado hasta ahora, pero, por otra parte, les impide mitigar la crisis de puntos y juego que actualmente padecen.

El próximo partido será el día 21 en el Nuevo José Zorrilla. El equipo bilbaino rendirá visita al Valladolid de José Luis Mendilibar. Los del zaldibartarra se encuentran en los puestos de descenso, pero en caso de ganar a los rojiblancos, dejarán a los de Caparrós inmersos de lleno en la parte más baja de la tabla.

Será un partido donde el entrenador vizcaino estará especialmente motivado para enseñar a los que fueron sus pupilos¯con los que no congenió especialmente bien¯ su capacidad para hacer funcionar a un equipo. En Valladolid están encantados con él y sus jugadores confían plenamente en él.

Un encuentro que contará con algunas ausencias significativas. Por el Athletic, Asier Del Horno será baja después de ver la tarjeta roja ante el Almería. Todo parece indicar que Koikili tendrá una nueva, y merecida, oportunidad en Pucela. Asimismo, Caparrós podrá contar con el concurso de Igor Gabilondo, después de que el talentoso jugador de Añorga haya estado tres semanas de baja debido a un problema muscular.

Otra de las novedades importantes del Athletic en Valladolid, puede ser el concurso de Fran Yeste. El basauritarra encara la recta final de su recuperación en el pubis y puede que esté en disposición de entrar en la lista de convocados. A pesar de ello, todas las noticias relacionadas con la recuperación de Yeste han de ser tomadas con extremada cautela, ya que el zurdo ha sufrido varias recaídas.

En una idéntica situación a la que vive Del Horno, está Joseba Llorente en el equipo vallisoletano, ya que el hondarribiarra fue expulsado en el último partido frente al Racing.

Con estas premisas, la victoria en tierras castellanas se antoja muy necesaria para suavizar el clima de nerviosismo que cada vez se deja notar más en la capital vizcaina. No sólo eso, sino que los rojiblancos recibirán un importante balón de oxigeno, aumentarían su margen de maniobra y alejarían al Valladolid en la tabla clasificatoria. De lo contrario, la situación del equipo se complicaría ostensiblemente y el propio Caparrós quedaría en una tesitura muy delicada. Muy similar a la que vivió el propio Mendilibar hace dos temporadas.

No será una visita nada sencilla, ya que tradicionalmente Zorrilla no ha sido un campo especialmente propicio para el Athletic. Los bilbainos no ganan allí desde el año 1999. Entonces, los dirigidos por Luis Fernández lograron el triunfo tras imponerse por 0 goles a 3. Los tantos del equipo rojiblanco fueron marcados por Felipe Guréndez, Julen Guerrero y José Mari.

El resto de visitas, salvo la de la campaña 2000/2001, con Rojo en el banquillo, que se saldó con empate, ha deparado diferentes derrotas para los rojiblancos. Así, en los dos años de la segunda etapa de Heynckes el Athletic sucumbió por 2 a 0 en Valladolid. En el primero de ellos, Tote marcó un gol de rabona. Con Valverde se repitieron dichos marcadores. Ahora toca invertir esa dinámica haciendo frente al pasado reciente con la intención de que no se repita.