CRÓNICA Reforma en Venezuela
Los campesinos se suman a la marea por la nueva constitución
El sector primario ha sido el último, de momento, en sumarse a la gran marea en favor de la reforma constitucional que impulsa el Gobierno de Hugo Chávez en Venezuela y a la que ya habían expresado su apoyo trabajadores de otros sectores. La reforma será sometida a referéndum a primeros de diciembre. Comienza así una campaña de movilización y aportes de diversos sectores en apoyo a dicha reforma, con la que se intentará consolidar el nuevo modelo socialista.
Reivindicando la construcción del socialismo bolivariano; la reforma constitucional que afianza principios fundamentales como la soberanía agroalimentaria; la erradicación del latifundio; y ratificando el apoyo al proyecto del Gobierno Revolucionario, decenas de miles de campesinos y pescadores de todo el país salieron la pasada semana a las calles de Caracas, sumándose a otros sectores de trabajadores que ya habían expresado su apoyo a esta iniciativa en las últimas semanas.
Este movimiento nacional reitera su decisión unánime de no volver al pasado, dominado por el imperialismo y la oligarquía cipaya, y resalta la necesidad de avanzar en la construcción de un proyecto donde el pueblo tiene derecho a manifestarse, a participar y a construir activamente su propio futuro en todos los ámbitos; político, económico, social y cultural.
Un proyecto de reforma constitucional, que como ha manifestado el propio Hugo Chávez, «es otra etapa en este proceso de construcción de la Venezuela Bolivariana y Socialista...está pensado en la necesidad de seguir transfiriendo más poder al pueblo».
Rescate de tierras
El artículo 305 de la actual Constitución Bolivariana de Venezuela establece lo siguiente: «El Estado promoverá la agricultura sustentable como base estratégica del desarrollo rural integral a fin de garantizar la seguridad alimentaria de la población...» y; en el 307 se dispone que «el régimen latifundista es contrario al interés social...». Al respecto, la propuesta de reforma constitucional del Gobierno plantea profundizar precisamente en esos dos aspectos; por una parte, en la producción de alimentos para garantizar la soberanía alimentaria del pueblo y, por otra, en la prohibición expresa del latifundio.
En definitiva, se establece elevar a rango constitucional principios fundamentales como la soberanía alimentaria y la prohibición del latifundio, que a su vez, permitirá acelerar el proceso de rescate de las tierras con vocación agrícola para ponerlas en producción y así producir los alimentos que requiere el pueblo venezolano.
Esto también permitirá, a través del rescate de las tierras en todo el país, la ocupación productiva y social del territorio sobre la cual se sustente el desarrollo integral del campo venezolano.
Para Omar Díaz, dirigente campesino del Estado Apure, el apoyo a la reforma constitucional es fundamental porque la misma plantea la prohibición absoluta del latifundio y la recuperación de las tierras para la producción de alimentos.
«No al latifundio definitivamente. Las tierras serán para trabajarlas, para sembrar lo que vamos a comer, lo que el pueblo necesita para alimentarse».
Por eso, Jairo Hernández, representante del movimiento campesino del Estado de Barinas considera que la marcha que tuvo lugar en Caracas fue «una muestra de unidad en la defensa y respaldo de un proyecto revolucionario, un proyecto, una reforma que debemos avalar porque la misma permitirá que avancemos hacia la construcción de la Venezuela socialista, una sociedad más justa socialmente donde todos y todas tengamos cabida».
El movimiento campesino nacional reitera la importancia de debatir y analizar cada uno de los 33 artículos propuestos en la reforma porque, «sólo el Gobierno Bolivariano nos ha permitido participar activamente en la construcción de la patria nueva y, no debemos perder esta nueva oportunidad pues es nuestro futuro, el de nuestros hijos, el de nuestro pueblo», asegura Yajaira Quijada, representante del consejo comunal de Guaribe, en el Estado de Guárico.
Goizeder ODRIOZOLA Caracas