«Esta noche, 854 millones de personas irán a dormir con el estómago vacío», advirtió ayer Jacques Diouf, director general de Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO) con motivo del Día Mundial de la Alimentación. «Nuestro planeta produce alimentos suficientes, en cantidad y calidad, como para alimentar a toda esa población. Sin embargo, 854 millones de personas irán a dormir con el estómago vacío», insistió en el acto realizado en la sede que este organismo tiene en Roma.

Recordó que el derecho a la alimentación está formalmente reconocido en la Declaración Universal de los Derechos Humanos adoptada en 1948. Ese concepto, añadió, «implica una reorientación de la idea de caridad y del concepto de derecho. Garantizar a cada uno de los humanos una alimentación adecuada y regular no sólo constituye un imperativo moral y una inversión que se puede traducir en beneficios económicos enormes: es la materialización de un derecho humano fundamental y el mundo tiene los medios para llevarlo a cabo», incidió.

Aunque consideró que cada vez se ejerce mayor presión en el suministro de alimentos y productos básicos como el trigo y la leche, advirtió de la subida de precio que están experimentando. En este sentido, la directora ejecutiva del Programa Mundial de Alimentos (PAM), Josette Sheeran, subrayó que «el crecimiento demográfico, el cambio climático y el precio de los productos básicos parecen estar trabajando en nuestra contra, amenazando con convertirse en una tormenta perfecta con una abrumadora situación de necesidad». Pese a ello, expresó su «esperanza de poder acabar con el hambre. La ciencia y la educación están de nuestra parte», manifestó Sheeran.

Nuevos y crecientes problemas

El presidente de Tanzania, Jakaya Mrisho Kikwete, denunció que, «a diario, 40.000 niños mueren en el mundo a causa de la malnutrición y las enfermedades relacionadas». «Todos los países son capaces de garantizar el derecho a la alimentación. Pero, para la mayoría de los pueblos del sur, esto no será posible más que revolucionando nuestra producción agrícola», destacó el mandatario africano.

El presidente del Fondo Internacional de Desarrollo Agrícola (FIDA), Lennart Bage, llamó la atención sobre «la urgente obligación moral de invertir en desarrollo agrícola como forma de combatir el hambre y devolver la dignidad a los pobres». Alertó también de la aparición de «nuevos y crecientes problemas, como el cambio climático que hace a estas personas todavía más vulnerables».

El Día Mundial de la Alimentación se celebra anualmente en 150 países. Entre los eventos más destacados este año figura una vigilia a la luz de las velas que recorrerá el mundo. También habrá conciertos en El Cairo, Roma y Bamako, eventos deportivos como la Carrera por Alimentos que tiene lugar en la capital italiana y Turín o cursos universitarios, como en el caso, de Italia, Irán e Irlanda.