Este próximo domingo comienza una semana clave para las aspiraciones de muchos equipos y, sobre todo, para determinar cuál va a ser su tendencia a medio plazo. En ese periodo de tiempo se van a poner en juego nada menos que nueve puntos, una cantidad lo suficientemente importante como para auparte en la clasificación o relegarte a los últimos puestos.

Andoni Iraola es consciente de ello, dado que, dependiendo del rendimiento que se obtenga en esos tres partidos, «se van a empezar a establecer las primeras diferencias». Máxime si tenemos en cuenta que los próximos rivales del Athletic van a ser de su liga particular -Betis, Getafe y Recre-, «a los que siempre es positivo meterles puntos de diferencia».

Claro que el Betis, inmerso en la parte baja de la tabla y sin encontrar todavía un patrón definido para su juego, no lo va a poner nada fácil. «Siempre se habla de esa fama de Cúper de no querer encajar goles, lo ha transmitido a otras escuadras que ha dirigido y seguro que lo está trabajando en el Betis para que sea una escuadra difícil de batir», indicó el de Usurbil.

Tendencia negativa casera

El polivalente jugador -hasta ahora Caparrós prácticamente lo ha utilizado de lateral derecho- discrepó sobre la idea que se ha asentado en el entorno de que los rojiblancos siguen inmersos en una tendencia negativa en propio campo.

«Es pronto para afirmar tal cosa, pues no llevamos 500 partidos en casa como para sacar conclusiones definitivas. Sí que es verdad que en el último partido, ante el Almería, es cuando más cerca estuvimos de la victoria, pero no supimos sujetar el marcador una vez hecho lo más díficil. En nuestra mano está darle la vuelta al hecho de que los rivales vengan crecidos a San Mamés», explicó.

El Palacio Euskalduna acogerá hoy a partir de las 19.30 una nueva asamblea general ordinaria de socios, cuyos temas estrella serán las cuentas del nuevo ejercicio económico del club y las decisiones a adoptar en torno al despido del que fuera delegado del Athletic, Txato Núñez.