El Gobierno español paraliza las obras del TAV en Barcelona
GARA |
El ente gestor de infraestructuras del Gobierno español (ADIF) paralizó ayer las obras de construcción del túnel del TAV en el tramo L'Hospitalet de Llobregat-Torrassa, después de que un gran socavón provocara el hundimiento de una parte de un andén de la estación de Bellvitge.
El Gobierno español decidió también retirar la concesión de estas obras a la empresa OHL, perteneciente a Juan Manuel Villar Mir, a quien distintos medios de comunicación han vinculado con el PP.
El incidente de ayer es el último de una serie que se han registrado en el tramo Bellvitge-Sants han provocado el cierre de este tramo ferroviario, lo que ha obligado a que durante esta semana más de 100.000 personas que habitualmente emplean los trenes de cercanías de Renfe o de Ferrocarrils de la Generalitat para desplazarse a sus lugares de trabajo tuvieran que hacerlo en autobuses, lo que, a su vez, ha provocado grandes atascos de tráfico en los accesos a Barcelona.
Tras la suspensión de las obras del túnel, se da por imposible que el TAV pueda llegar a Barcelona el 21 de diciembre, tal y como había prometido el presidente del Gobierno español, José Luis Rodríguez Zapatero.
Zapatero comparecerá el miércoles en el Congreso de los Diputados para explicar los problemas en las obras del TAV.
El delegado del Ministerio español de Fomento para los servicios ferroviarios, Jordi Prat, descartó que el accidente registrado ayer en Bellvitge suponga riesgo alguno para los vecinos de la zona. En los últimos días, habitantes del barrio de Gornal han denunciado que en sus domicilios han aparecido grandes grietas, que atribuyen a las obras del túnel del TAV.
Por otra parte, todos los partidos del Ayuntamiento de Barcelona excepto el PSC pidieron ayer la dimisión de la ministra española de Fomento, Magdalena Álvarez.