Representantes del Comercio de Bizkaia de ELA anunciaron ayer la convocatoria de seis jornadas de huelga que tendrán lugar entre el próximo 22 de noviembre y el 9 de enero. Resaltaron que en un sector en el que la patronal no esconde la existencia de grandes beneficios, los trabajadores soportan «jornadas maratonianas», hay cuatro convenios por firmar, los salarios son de 2004 y se registran niveles importantes de precariedad.

Criticaron que «Cebek mantiene su política de no negociar» y explicaron que, además de no aceptar «ni una hora de reducción de jornada sin concesiones» y plantear un «incremento del IPC raspado», ahora «deciden dar carpetazo a los años 2005 y 2006, porque «consideran que la negociación de los cuatro convenios que nos quedan por firmar -Comercio Textil, General, Metal y Mueble-, se ha alargado demasiado».

Calificó esta actitud de «absoluto desprecio» hacia los trabajadores e indicó que la postura de Cebek no es compartida por la mayoría de los empresarios del sector, por lo que emplazó a quienes no están de acuerdo a que «sea su palabra la que se oiga en las mesas de negociación, porque los que realmente padecieron las últimas huelgas fueron los dueños de las tiendas».

Las primeras movilizaciones arrancarán hoy con concentraciones en distintas tiendas de comercio textil. Las huelgas serán el día 22 en Artea; el 5 de diciembre en Bilbo; el 19 en Max Center y los días 7, 8 y 9 de enero, coincidiendo con las rebajas, en Bilbo, Artea y Max Center, respectivamente.

ELA precisó, no obstante, que está «dispuesta a negociar en cualquier momento» e invitó al resto de sindicatos a sumarse a su convocatoria.

«Fines partidistas»

Conocida la convocatoria, uno de esos sindicatos, LAB le acusó de actuar «exclusivamente con fines partidistas y de forma totalmente unilateral, sin contar con el resto de sindicatos».

Tras denunciar la actitud de la patronal, que «hace inviable la posibilidad de alcanzar un acuerdo por mantener una postura totalmente cerrada a la reducción de jornada y a las mejoras necesarias en los salarios», subrayó la necesida de luchar por la mejora de las condiciones laborales de este colectivo «tan castigado por la alta precariedad». «Pero no cabe duda -destacó- de que el éxito de la lucha está en realizarla de forma conjunta y sin priorizar los intereses de cada sindicato». Anunció que, a partir de ahora, valorará qué movilizaciones desarrollar.