José Mari Pérez y Maixabel Gaztañaga, consejeros de Kutxa en representación de Banatuz, y Joxean Urkiola, de LAB, denunciaron en una rueda de prensa celebrada ante la sede de Kutxa en Donostia las intenciones de la caja de aumentar, de manera «escandalosa», las comisiones por mantenimiento de libretas, apuntes por movimientos y el cobro de intereses, aumento que, matizaron, castiga especialmente a los sectores populares, «a los que menos tienen, a los jóvenes y a las mujeres».

Pérez indicó que la campaña de recogida de firmas que ahora se pone en marcha no pretende ir contra nadie, sino que, con los estatutos de la entidad en la mano, «comparar el sentido de Kutxa desde su nacimiento» y el cambio de rumbo que se opera en la entidad a partir de 1977 y el seguimiento de la banca en general que hace en las últimas décadas, para «meterse en el campo especulativo».

Así, afirmó que «dentro de esa trayectoria tiene una enorme importancia el que Kutxa diga que voy a subir el cobro del mantenimiento de libretas, voy a bajar los intereses y, aquí, quiero recordar que los intereses se bajan de forma especial a aquellos que tienen menos de 6.000 euros». Para ellos los intereses previstos son del «0,01%, tengan o no la nómina domiciliada, como despreciando previamente el monto de esa nómina». Del mismo modo, si la cantidad se sitúa entre 6.000 y 30.000 los intereses serán del 0,25% y del 0,50% con nómina domiciliadas».

Pérez recordó el artículo quinto de la Kutxa y exigió que «se atenga a los estatutos, porque ellos son los que le han dado su definición como caja social para los menos beneficiados».

Urkiola desgranó las medidas que pretende imponer la dirección de Kutxa a partir del 1 de diciembre. Sus consecuencias se sentirían a los tres meses.

Señaló que el mantenimiento «pasa de 3 euros anuales a 10 euros. Como siempre, Kutxa utiliza muy bien el marketing y en las cartas que ha mandado a la clientela dice que pasa de 3 anuales a 2,5, lo que no dice, o lo dice soterradamente, es que esos 2,5 euros va a ser trimestral. Por tanto remarcar que es una subida escandalosa de ese tipo de comisiones, comisiones por tener cuenta corriente, libreta de ahorro, lo que siempre se ha entendido como ahorro popular».

Respecto a los apuntes por movimiento, indicó que «hasta ahora Kutxa ha estado intentando que la clientela domicilie todos sus recibos, haga un montón de operaciones, ha reparti- do tarjetas para que se haga cualquier pago a través de la tarjeta y ha intentado que estemos todos vinculados a Kutxa en todo nuestro quehacer diario, pues ahora, a partir de los 50 apuntes va a cobrar 0,06 euros por apunte. Nos incitan a que llevemos todo a Kutxa y una vez que hemos domiciliado todo ahora nos quieren cobrar por cada apunte. Hay que reconocer, y así lo hicimos saber en la comparecencia anterior, que Kutxa empieza a recular, dice que ahora no va a considerar apunte cualquier movimiento».

Por todo ello, indicaron que «queremos una Kutxa que cumpla su función social, y esa es nuestra reivindicación. Pedimos volver a los orígenes de Kutxa, a sus principios. Queremos una Kutxa al servicio de la clientela y cuyos beneficios se centren en Euskal Herria y Gipuzkoa y seamos los guipuzcoanos principalmente los beneficiarios de esta función social».