Derecho de huelga, también en el sector público
Las huelgas y movilizaciones que están teniendo lugar en el sector público tanto en Ipar Euskal Herria, principalmente en el transporte ferroviario y en el sector eléctrico, como en Hego Euskal Herria, en Osakidetza, nos pueden llevar, con la ayuda de los gestores de las administraciones, al tópico que fomenta la idea de que esa lucha carece de motivo alguno, intentando presentar a los trabajadores del sector público como privilegiados. Tópico falso y perjudicial para esos y todos los trabajadores, dirigido a la división y no a la comprensión y mejora de quienes se encuentran en peores condiciones laborales, y que entiende la igualdad de condiciones en la máxima precariedad en vez de en la ausencia de la misma. Por otro lado, pretender que los trabajadores del sector público ejerzan su derecho de huelga sin que ésta tenga incidencia en los servicios que prestan es simplemente intentar privarles de ese derecho, toda vez que así se anula la posible efectividad de la huelga. Esa forma de lucha supone un gran sacrificio para quienes la llevan a cabo, y han recurrido a ella tras largos meses en pos de unas negociaciones que aborden sus problemas y den lugar al acuerdo. Si las administraciones invirtiesen en buscar acuerdos y soluciones con los trabajadores el tiempo que dedican a enturbiar el estado de las cosas, a buen seguro las huelgas y los paros no serían necesarios.