Las nuevas tendencias en arte están presentes en Getxoarte
Los artistas seleccionados para la séptima edición de Getxoarte ocupan desde ayer los stands bajo la carpa de la Plaza de la Estación de Areeta con propuestas muy diversas. Entre los participantes está Iranzu Antona, ganadora del Certamen de Artistas Jóvenes de Navarra.
Izaskun LABEAGA | GETXO
El Salón de las Artes Emergentes abrió sus puertas ayer por la mañana. Este año sin corte de cinta, la actividad en el interior de la enorme carpa echó a andar en un ambiente inmejorable.
Los jóvenes envían sus proyectos al jurado pero es in situ cuando realmente se aprecian. Tras el primer paseo por los pasillos, la impresión de la comisaria, Alicia Fernández, fue la de una muestra «muy fresca. La gente que viene conoce ya el espacio, bien porque ha participado o porque lo ha visitado en años anteriores, y eso se nota en el resultado», comentó a GARA.
La pintura abstracta prácticamente desaparece y gana terreno la figurativa. Maite Piñero demuestra maestría con la brocha y obsequia al espectador con un conjunto de lienzos de gran tamaño dedicados al cielo. En frente está Gorka Murillo, cuya obra se exhibe hoy en el Photomuseum de Zarautz. Asiste con una serie de desnudos, en los que aborda cuestiones como el de la posesión.
Cerca está la obra de Zuhar Iruretagoiena, que vuelve a Getxoarte, salón para el que ya ha sido seleccionada en otras dos ocasiones. Recupera una maja desnuda, que algunos recordaran de su anterior paso por el salón getxotarra.
El jueves se conoció el fallo del Certamen de Artistas Jóvenes de Nafarroa. La ganadora, Iranzu Antona, muestra en Getxo su trabajo sobre la familia. Son varias pinturas, incluido un autorretrato.
Autofinanciación
Irrumpe con fuerza el dibujo entre las preferencias de esta nueva generación de artistas, que lo combinan con otras técnicas. La creadora de Errenteria Arrate Rodríguez es una de las artistas con obra sobre papel.
Angela Alonso, María Carrasco y Nuria Serrano comparten espacio con simpáticas ilustraciones y mucho color.
El bilbaino Kepa Peñil ha experimentado con la fotografía y el dibujo digital. Imagina la mirada de un niño y bajo esa óptica representa varias grúas, «el símbolo de la destrucción», que toma forma de monstruo. Procedente del mundo de la animación y del graffiti, utiliza como base la fotografía y dibuja sobre ella. También diseña camisetas. No es el único que las vende. Las chapas son otra alternativa para sacarse unos euros para financiarse futuros proyectos.
Ayer se estrenaba la página web de ``belcro+'', una públicación con contenidos relacionados con la creación que verá la luz en breve. Estitxu Losa es una de las promotoras de la revista, de la que da cuenta a través de Getxoarte. La instalación que presenta tiene relación con la intervención en el espacio.
La bilbaina Ane Pikaza expone el plano de situación de un jardín privado que desaparecerá pronto, con la demolición del Getxo Antzokia. Durante cuatro meses ha realizado intervenciones en esta zona verde, «activándola». Le interesa la idea de «habitar un espacio inhabitable», como el mar, otra propuesta en proceso de esta artista que reside hoy en Florencia.
Espacio para la reivindicación
Haizea Merino, Eduardo Cañas, Goikoana Olalla y Andrea Martínez han reunido en su stand todo el material que han rescatado de la basura. ``Diógenes'', nombre con el que han bautizado el cuarteto, reflexiona sobre los materiales para la escultura y denuncia el despilfarro. «Cada día los objetos son más efímeros. Nosotros damos un nuevo sentido a lo que otros consideran inservible», explican.
La malagueña Laurita Siles recuerda con mucho cariño el verano que pasó en Armintza (Lemoiz) aprendiendo euskara. Trabajó en un supermercado. Fotografió a la clientela y con cada retrato realizó una ficha con el nombre de una fruta o una verdura en euskara y castellano. En Areeta exhibe 37 fotografías en homenaje a aquella comunidad. Llama la atención sobre «la poca humanidad» de las grandes superficies y, en apoyo al pequeño comercio, ha montado una mesa con folletos de tiendas de Uribe Kosta.