Final del Cuatro y Medio de Segunda
Iñigo Díaz sufre de lo lindo para confirmar el pronóstico
El delantero de Santacara llegó a ir perdiendo por 10-15 mediado el encuentro, pero pudo reaccionar a tiempo para imponerse a un trabajador Jokin Argote en una final marcada por el buen ambiente.
Asier AIESTARAN | DONOSTIA
Iñigo Díaz se proclamó campeón del Cuatro y Medio de Segunda categoría al imponerse a Jokin Argote por 22-17 en la entretenida final disputada ayer en Beotibar tolosarra. Con el recinto a rebosar y un ambiente que muy poquito tiene que envidiar a las grandes finales de Primera, el delantero navarro fue capaz de dar la vuelta a un 10-15 desfavorable que le puso contra las cuerdas. Al final, un parcial de ocho tantos acabó con las opciones de su rival.
Las primeras ventajas en el marcador fueron para Iñigo Díaz. El de Santacara se adelantó 3-0 y 7-4 en el marcador y parecía que los tiros podían ir en la misma dirección que en el partido de liguilla, cuando Díaz superó a Jokin Argote por un claro 22-11.
Pero el zaguero de Meagas, como en todo el campeonato, volvió a demostrar que nunca se da por vencido y fue capaz de endurecer el partido para dar la vuelta al luminoso. Un pelotazo demasiado largo de Díaz suponía el tanto número 15 de Argote y le daba una diferencia de cinco tantos. Eran los mejores momentos del guipuzcoano y Díaz parecía algo nervioso.
De todos modos, la final tenía guardada una nueva voltereta y justo en ese momento fue el propio Díaz el que encadenó una tacada de ocho tantos consecutivos para irse del 10-15 al 18-15. Fue un cúmulo de bastantes factores: los buenos saques de Díaz -logró seis tantos-, sus remates de calidad arriesgando más que hasta entonces y algún error del propio Argote al querer evitar la jugada del rival.
Finalmente, la victoria fue para Iñigo Díaz, que también se adueña del billete en juego para disputar el próximo año el Campeonato del Cuatro y Medio de Primera categoría.
Iñigo Díaz se mostró exultante a la finalización del encuentro: «El ambiente ha sido excepcional, ver aquí a tanta gente del pueblo, de Iruñea, del Oberena... Es el mejor día de mi vida. La verdad es que estos días lo he pasado mal. He notado mucho los nervios y al principio tenía las piernas cansadas. Pero luego he cogido confianza y me he encontrado mejor. Ha habido un momento en el que he acusado cierta inexperiencia y me he descentrado por querer jugar demasiado en corto a Jokin. Al final he podido tranquilizarme y hacer mi juego». Argote, por su parte, admitió sentirse «apenado» por la derrota, aunque se queda «muy a gusto con la final jugada y el buen campeonato realizado».
A.A.
