La energía mueve a la economía. De ahí la necesidad de controlarla, desde el petróleo hasta nos nuevos combustibles. No importa tanto el medio ambiente, aunque se utilice como excusa. Hay que garantizar el suministro energético y que pueda llegar a los procesos productivos que generan el desarrollo económico de unos pocos. El EVE ha cumplido 25 años. Impulsó la llegada del gas natural y se ha fijado retos importantes en la energía renovable. No está claro, aunque su director general José Ignacio Hormaeche diga que sí, que es necesaria tanta energía.

¿En qué elementos se basa para concluir que en este tiempo ha impulsado una estrategia de éxito en materia energética?

El balance es positivo en tres grandes líneas: el ahorro y eficiencia energética. Se ha notado en el consumo industrial, porque pasamos de una industria en los años 80 que consumía mucho, pero no era eficiente. Hicimos el esfuerzo con ayudas a las inversiones para concienciar a la industria. La segunda importante fue el acceso al gas natural, a más del 90% de las empresas y población. Se partió de cero, porque los reyes energéticos eran el carbón y el fuelóleo. Desde 2005 el gas natural está por encima del consumo de petróleo en cuanto a utilización de combustible para necesidades energéticas.

¿Cuál es la tercera línea a la que se refería?

La generación eléctrica. El hecho de que en estos últimos años el 70% de la electricidad que se consume en Euskadi se genere aquí, en plantas de la CAV. Hemos pasado de entre el 20% y 30% al 70%. Es positivo.

¿A qué coste se ha hecho esto?

El coste público casi cero. Porque las que han conseguido ese crecimiento son las tres plantas de ciclo combinado. En una de ellas somos socios al 25%, pero es una inversión que está casi amortizada del todo. Las otras dos son de empresas privadas. Desde el Gobierno lo que se ha hecho es incentivar, animar y atraer inversores que han puesto plantas.

Se nos está diciendo que avanzamos hacia el autoabastecimiento energético, pero visto así, ¿eso es bueno o malo ?

Lo del autobastecimiento hay que matizarlo. Caminamos a que ese 70% pase a ser un 100% de generación de electricidad. Una parte importante se va a generar en las centrales de ciclo combinado de gas natural, la materia prima la traemos de fuera. Pero los coches, por así decirlo, se van a seguir llenando de gasolina. El petróleo va a seguir siendo algo externo.

¿La de Gas Natural en Lantaron?

Sí. Es la que cierra ese objetivo. Con Lantaron en funcionamiento podríamos generar el 100% de las necesidades eléctricas no sólo de los hogares sino de la industria y servicios de la actividad empresarial. Serían tres de 800 megavatios por hora y la de 400 megavatios.

¿El tercer tanque para Bahía Bizkaia Gas se va a construir?

Sí. Estamos en el proceso administrativo. El objetivo es que en el primer semestre de 2008 se adjudique, tras estudiar las ofertas, y comprobar que el Ministerio español de Industria no nos perjudique en el modo de retribuir las tarifas, como nos está ocurriendo últimamente. Porque haces unos planes de amortización y rentabilidad de las inversiones y cuando menos te lo esperas lo cambian.

¿Con ese nuevo almacén y el futuro de la plataforma Gaviota de Repsol, qué se va a hacer?

Naturgas está impulsando, nosotros somos socios minoritarios, pero seguimos estando en el consejo, el refuerzo de la red de Euskadi, el impulso del enlace con Francia y el eje transcantábrico con Asturias. Una inversión muy importante y es una salida directa si tenemos una BBG ampliada, si consigo esa capacidad de gas para llevarlo a Asturias, a Francia e incluso a la Península nos abre una posibilidad de movimiento económico importante. Es una infraestructura que daría mucho impulso a todo lo que tenemos aquí. Repsol tiene congelado su proyecto.

¿Son necesarios tantos tanques: los tres de Bahía Bizkaia Gas y el del Repsol en la Gaviota?

Sí. Es bueno, porque nos convierte en un polo de actividad en torno al gas. En una puerta de entrada.

¿Los emiratos vascos?

Ojalá tuviéramos tanto gas como los emiratos. Somos donde se paga el peaje. Tenemos unas instalaciones muy complejas que dejan actividad, crean empresas y puestos de trabajo, también impuestos. Es una actividad económica que se genera en este entorno que creemos que es necesaria y buena como país. A parte de que es una garantía de suministro.

¿Para qué nos sirve?

Para asegurar que no nos va a faltar en las casas gas natural, ni en las empresas para los proceso que utilizan calor y que las centrales de ciclo combinado que nos van a dar la electricidad que necesitamos.

Se nos dice que la mejor energía es la que no se consume, pero no ocurre, sobre todo, por la industria y el transporte consumen enormes cantidades y contaminan

La industria es la que más demanda energía. Hay que tener en cuenta que somos una económia industrial muy importante. Un 28% del PIB depende de la industria. Para seguir manteniendo esa capacidad industrial, el consumo es obviamente alto, aunque ha bajado de forma importante en los últimos años.

Entre sus datos, se nos dice que el año pasado se ahorraron 6 millones de toneladas de emisiones de CO2, pero la UE ha suspendido al Estado español en el tema de emisiones del Protocolo de Kioto, ¿aquí como estamos?

Estamos algo mejor. Aunque el protocolo de Kioto no nos obliga como país, sí tomamos como referente al 15% al que el Estado español se acogió. Estamos en un 29%, pero se puede ir recortando, como se verá con el Plan vasco de Lucha contra el Cambio Climático.

Entre los objetivos del EVE, destaca conseguir que en 2010 el consumo de energía renovable alcanze el 12%. ¿Se va a conseguir ese objetivo?

En este momento no llegamos a una producción del 5%. Como se suele decir es un objetivo ambicioso y exigente. No lo pusimos por inspiración. Es el mismo que estableció la UE, sabiendo que somos un país con menos recursos y menos terrenos con las renovables nos tiramos a la piscina. Creemos que es posible.

¿Está retrasado?

Sí. Vamos retrasados. Deberíamos de estar en mayores porcentajes. El objetivo es alcanzar los 625 megavatios instalados en energía eólica, que sería lo que nos debería permitir acercarnos al 12% de la energía renovable. Estanos en 153 megavatios. Hay que dar impulso.

¿Tiene futuro el biocombustible y el bioetanol porque los estudios cuestionan su eficacia por la destrucción del campo?

Hay mucha historia.

Claro porque es un negocio. ¿Es lícito que haya gente en el mundo muriéndose de hambre y otros estén triturando cereales para convertirlos en energía?

El gran problema que se tiene que resolver es de dónde sacan la materia prima. El año pasado no llegó al 1% del cereal producido en Europa que se destinó a bioetanol. En el futuro crecerá por cuestiones medioambientales. Cuanto más alto sea el precio del petróleo, más fácil crecen los biocombustibles, porque son más competitivos. No tienen ese coste de producción que tiene el petróleo.

Porque está subvencionado

Lo que está es destasado, no pagan determinados impuestos

Algún día el biodiésel no tendrá apoyo y pasará igual que con el petróleo

El biocombustible está teniendo esa ayuda para competir con el petróleo. Es necesario. Luego ya veremos qué pasará.

¿Hay masa vegetal suficiente para generar una producción estable de biocombustible?

El objetivo de la UE es llegar a 2020 con un consumo del 10%. Es factible, según los estudios. La UE ha mostrado la necesidad de establecer certificados en origen para garantizar que el proceso de los biocombustibles no destruya el campo.

Juanjo BASTERRA